El fútbol busca un nuevo rey. A un mes del comienzo del Mundial de Catar, es difícil saber qué selección logrará el título en una competición que se antoja atípica, para empezar por sus fechas. Entre las máximas favoritas, la campeona Francia y los gigantes sudamericanos Brasil y Argentina.
El torneo se concentrará en un territorio muy reducido y se jugará a final de año, interrumpiendo la temporada de clubes europea, por lo que la gran cita se presenta rica en incertidumbres para las 32 selecciones clasificadas.
¿El regreso de Sudamérica?
La mayor parte de ellas no tendrán una preparación física específica ni la habitual serie de amistosos para rodarse antes de la 22ª edición del Mundial (20 noviembre-18 diciembre), más corta de lo habitual, porque se disputará en 28 días.
Sin tiempo para ponerse a punto, la ventaja es para equipos consolidados, como el Brasil de Neymar, actual número 1 en la clasificación FIFA, o la Argentina de Messi, campeona sudamericana en 2021 e invicta desde hace 35 partidos, que sueña con ofrecer la consagración planetaria a su número 10 y capitán.
Tras dos décadas de dominio europeo (Italia ganó en 2006, España en 2010, Alemania en 2014 y Francia en 2018), ¿ha llegado la hora de Sudamérica? Así lo cree el seleccionador de la Roja Luis Enrique, que ve a Argentina “por encima” y a Brasil “también”.
“Brasil, que juega más a nivel individual que colectivo, será muy fuerte. Argentina también”, añadió a la AFP el francés Marcel Desailly, campeón del mundo en 1998, que también considera que su país “sigue siendo uno de los favoritos”.
Los Bleus rechazan las dudas
Los Bleus de Kylian Mbappé, decepcionantes en la Eurocopa el año pasado cuando fueron eliminados por Suiza en octavos, añaden a su equipazo a Karim Benzema, ausente en el título de 2018 y rehabilitado por el seleccionador Didier Deschamps.
Con el jugador del Real Madrid, elegido Balón de Oro el lunes, Francia volvió a subir a lo más alto de un podio al ganar la Liga de Naciones en 2021, con un gran gol suyo en la final ante España.
En contra de Francia, la plaga de lesiones que sufre y los problemas extradeportivos, además de unos resultados poco alentadores -una victoria en los últimos seis partidos-.
Ningún campeón mundial ha sido capaz de revalidar su corona desde el Brasil de Pelé en 1962.
Por detrás de Francia, Brasil y Argentina, una caravana de equipos que va desde la Inglaterra subcampeona de Europa pero decepcionante en los últimos meses a las rejuvenecidas e irregulares Alemania y España, pasando por Países Bajos, de vuelta al Mundial, o Bélgica, con la generación de Kevin de Bruyne y Eden Hazard buscando su gran trofeo.
‘Habrá grandes sorpresas’
¿Algún otro equipo puede dar la gran sorpresa y levantar el trofeo el 18 de diciembre en el estadio de Lusail (80.000 plazas)? Aquí aparecen Croacia, subcampeona mundial en 2018, Senegal, actual campeona de África, Portugal, con la leyenda Cristiano Ronaldo y un plantel del máximo nivel, o Uruguay, en el último baile de Luis Suárez y Edinson Cavani.
El equipo anfitrión Catar se ha preparado minuciosamente para dar la cara en su torneo. El objetivo es superar la primera fase del primer Mundial organizado en un país árabe.
Pero los partidos de preparación disputados por el equipo dirigido por el español Félix Sánchez no han ofrecido muchas garantías.
“Veremos grandes sorpresas en el Mundial, equipos inesperados van a estar en forma”, señaló a la AFP Nicolas Dyon, antiguo preparador físico de la selección de Catar.
“Vamos a un país con muchas incertidumbres en términos de humedad, incluso si es invierno y no hace tanto calor, ¿cuál será el nivel de oxígeno? ¿cómo se adaptarán los jugadores? ¿favorecerá a los equipos pequeños?”, añadió.
En este contexto inhabitual, ¿se verá un buen espectáculo? Los especialistas auguran que sí, porque las estrellas que juegan en Europa llegarán en forma, mejor que al final de temporada, época en la que se suele disputar el torneo.
“La ventaja de esta Copa del Mundo es que los jugadores van a estar menos cansados, físicamente y mentalmente”, resumió Cleber Xavier, asistente del seleccionador brasileño Tite.
AFP