La noticia del primer lugar de Venezuela por su crisis migratoria, que ya alcanza la cifra de 7.1 millones de venezolanos, no es una sorpresa, sino una consecuencia directamente proporcional a las actuaciones de la dictadura de Nicolás Maduro, que mantiene al país sometido en una Crisis Humanitaria Compleja. Así lo considera Fabiola Zavarce, representante de la Asamblea Nacional de Venezuela en Panamá.
Las cifras fueron convalidadas por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados y también por la OEA, donde se detalla además como Venezuela ocupa el primer lugar con 7.1 millones de refugiados sin ser un país en guerra, seguido de Ucrania con 6.8 millones de personas. En tercer lugar esta Siria con 6.6 millones, seguido de Afganistán con 2.7 millones y Sudán del Sur con 2.3 millones de refugiados.
“Sencillamente esto no tiene otra interpretación que el agravamiento de la crisis venezolana, que ha generado que 1 de cada 4 venezolanos se haya ido del país. Esta lamentable situación no tiene otra solución que alcanzar un cambio político que permita la recuperación de la libertad y la democracia en nuestra patria”, destaca Zavarce.
Para la representante del gobierno interino, el cerco que continentalmente se ha impuesto a los venezolanos, con la imposición de visas y medidas poco empáticas con la realidad, en nada favorece esta situación, pues al contrario, aumenta los riesgos y la vulnerabilidad para los migrantes.
“Entendemos que cada país es libre de tomar sus decisiones de manera soberana y según su conveniencia, como lo hace en estos momentos Estados Unidos, pero sin duda esto no soluciona esta tragedia. El aumento de las restricciones no disminuye el éxodo de connacionales sino que por el contrario genera una movilización por otras vías en las que se corre un riesgo mayor, al margen de la legalidad”, afirma la representante de la AN venezolana.
Explica Fabiola Zavarce que “la migración no es capricho ni una moda, es la consecuencia de un grave problema como lo es la Compleja Crisis Humanitaria que se vive en Venezuela. Ningún venezolano ha salido de nuestro país por voluntad propia. Para nadie es un secreto lo que significa un desplazamiento forzoso provocado por una crisis humanitaria, social e institucional despiadada. El Derecho Internacional de Refugio tutela a los desamparados por compasión y miseria”.
La inmediatez de la medida deja desasistidos a miles de migrantes que siguen transitando por Centroamérica, a quienes se les debe buscar una solución en el marco de la ley, con una aplicación organizada y mancomunada. “Son 7.1 millones de almas que nos duelen, y por quienes seguiremos luchando para que cuenten con condiciones justas, y más aún, para que más temprano que tarde cuenten con un país, su país, renaciente para regresar”, apuntó Zavarce para finalizar.
Para el momento, más de 9 mil migrantes se encuentran en tránsito en la provincia del Darién en Panamá, la mayoría de ellos venezolanos, sin saber que hacer tras la decisión de los Estados Unidos de no admitir el ingreso irregular de venezolanos.
Nota de prensa