Más de un mes sin recibir agua potable por tubería, pasan los habitantes de Barcelona, capital del estado Anzoátegui, según denunció el diputado del Consejo Legislativo Regional, Richard Casanova.
El legislador aseguró que en toda la zona norte de la entidad oriental, la falta del vital líquido “es una verdadera calamidad”. Según sus palabras, restablecer el servicio se ha convertido en un “clamor popular”, pero también en una pesada deuda del gobierno regional.
“La irresponsable promesa de Nicolás Maduro de solventar al 31 de diciembre el problema del agua en el país, no se cumplirá en ningún estado. Y en Anzoátegui el saldo negativo es evidente, pues a pesar de la supuesta inversión conjunta entre la gobernación e Hidrocaribe –cuyo monto se desconoce–, no se aprecia la mejora en el servicio de agua. Al contrario, la percepción es que cada día la situación se agrava”, indicó.
Asimismo, el parlamentario precisó que cada quince días, Hidrocaribe detiene las plantas José Antonio Anzoátegui y El Rincón, alegando una situación de turbidez del agua o trabajos de mantenimiento. A esto se le suma la baja presión en las tuberías, lo cual genera una distribución desigual del agua.
“En la parroquia San Cristóbal de Barcelona –dijo– sectores como Mesones y Los Potocos reportan que aunque están sometidos a ciclos de agua por 72 horas cada 7 días, este cronograma no se cumple. Y en la segunda semana de noviembre suman ya 20 días sin el servicio”.
De igual manera, explicó el también dirigente regional de Primero Justicia, que igual situación presenta la parroquia El Carmen, donde sectores populares como Fundación Mendoza, Los Tronconales, Yuleska, Barrio Sucre, Guamachito, Cayaurima y Barrio Corea, han pasado hasta 45 días sin agua.
Finalmente, invitó al mandatario regional a que “deje de pintar paredes bonitas y se dedique a resolver los problemas reales de la población, que está harta del despilfarro y la corrupción durante los últimos 20 años”.