Los autos de colección, aquellos que están exhibidos para que el público los contemple, lucen siempre relucientes, como si jamás se hubieran rodado. Sin embargo, hay excepciones a la regla como el Ferrari 365 GTB/4 Daytona (1969) que está en el Museo Ferrari de Modena, en estado original, luego de estar 40 años en el interior de un garage, cubierto de tierra, tanto que casi no puede apreciarse el color de la carrocería.
Por: Clarín
Esta joya automovilística se encontró en 2017 en Japón con una gruesa capa de polvo y así continuó, incluso con algunos componentes oxidados y en estado de abandono, como parte de la exposición de la prestigiosa marca del Cavallino Rampante.
La historia de este modelo se remonta a 1969, cuando fue vendido a Luciano Conti, un amigo de Enzo Ferrari. Luego en 1971 fue enviado a Japón, donde tuvo tres dueños hasta que terminó en manos de Makoto Takai, quien lo guardó en una cochera durante casi cuatro décadas. A pesar del abandono, rechazó varias propuestas para venderlo, como un capricho.
Luego de su descubrimiento, este clásico Ferrari se subastó por Sotheby’s y fue vendido en más de 1,8 millones de euros. A pesar de la erogación, desde ese momento el auto no recibió ningún tipo de cuidado, conservando siempre el mismo estado en el que se encontró.
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