Pese a tener un plantel con nombres de talla mundial, Bélgica sufrió una dura derrota (0-2) ante una selección de Marruecos que en su debut prometió dar batalla a cualquier equipo que se le interpusiera en su camino y que no se intimidó a cruzar sobre las llamas del “infierno belga”.
Lucho Suárez // lapatilla.com
Ambas escuadras mostraron características de juego similares. Verticales y brindando espacios defensivos. Un partido entretenido para cualquier fanático del fútbol.
Tras su victoria contra la difícil Canadá, Roberto Martínez hizo tres cambios para afrontar al equipo africano, entre los que destacó la suplencia de Yannick Carrasco, dejando su lugar a Thomas Meunier.
Las otras dos modificaciones en el once titular de Bélgica fueron las entradas de Amadou Onana y de Thorgan Hazard en lugar de Leander Dendoncker y Youri Tielemans.
Luego del pitazo inicial, los primeros 45 minutos fueron de idas y vueltas, pero sin “hacerse daño”. El partido estuvo abierto para ambos equipos.
Sin embargo, Marruecos tuvo la oportunidad de irse arriba antes del descanso.
En el ocaso del primer tiempo (45′), un tiro libre desde el costado derecho rematado por Hakim Ziyech se coló en un mar de cabezas que perturbaron la visión de Thibaut Courtois de cara al manejo de la esférica, la cual le golpeó en el abdomen y se coló en el fondo de su portería.
Para fortuna de Bélgica, un jugador que obstruyó el campo visual del guardameta se encontraba fuera de juego, situación que solo pudo ser percibida a través del VAR, el cual derivó a la anulación de la anotación.
Para cambiar la dinámica de su equipo, Roberto Martínez movió sus piezas, pero el tiempo de complemento transcurrió como el primero e incluso, favoreció el fútbol de Marruecos, quienes “sacaron petróleo” a cada arremetida contra la zaga belga.
Marroquíes tardaron 72′ minutos en abrir el marcador y el tanto que los puso adelante fue muy parecido al que les fue anulado en la finalización del primer acto.
Una falta desde la parcela izquierda ejecutada por Abdelhamid Sabiri se coló por el costado derecho del abdomen de Courtois. En esta ocasión, el principal no vio necesidad de recurrir al VAR para validar el tanto de los africanos.
Y por si fuera poco, los “diablos rojos” fueron víctimas de su propio “infierno”.
Transcurrían los 90′ cuando el talentoso Ziyech se internó en el área belga y con una asistencia precisa a Zakaria Aboukhlal consiguió la llave que les daría el gol de la satisfacción.
El delantero marroquí recibió y sin pensarlo lanzó un derechazo que Courtois no pudo detener con su gran estatura y habilidad.
Los africanos vieron la luz en el infierno y se acercaron un poco más a la clasificación a octavos de final.