Un fiscal en Bolivia pidió este jueves seis meses de prisión preventiva para el gobernador de Santa Cruz y líder opositor Luis Fernando Camacho, acusado de “terrorismo” en un caso relacionado con la salida del expresidente izquierdista Evo Morales en 2019.
“La medida cautelar que [se] ha solicitado es la detención preventiva por un periodo de seis meses”, a cumplir en el penal de máxima seguridad de Chonchocoro, dijo en rueda de prensa el fiscal asignado al caso, Omar Mejillones, tras el arresto de Camacho el miércoles.
El gobernador de Santa Cruz, líder de la tercera fuerza política en el parlamento (detrás del gobernante Movimiento al Socialismo, el izquierdista MAS, y el centrista Comunidad Ciudadana), fue detenido el miércoles por la policía, que cumplió órdenes de la fiscalía.
La fiscalía explicó que su detención se debe a la causa abierta contra Camacho por su participación en el caso denominado “golpe de Estado” contra Morales (2006-2019).
“Secuestrado”
Camacho fue detenido en una calle de Santa Cruz de la Sierra, principal centro industrial de Bolivia, y luego fue trasladado a La Paz para comparecer ante el fiscal Mejillones, pero se acogió a su derecho al silencio.
“No tengo miedo a la cárcel de la dictadura”, aseveró este jueves en la madrugada, vía Twitter, el gobernador de la región más poblada y próspera de Bolivia.
Y en otro tuit agregó: “Hoy fui secuestrado por la justicia del MAS. Mi única culpa es haber defendido la democracia y junto a todo un pueblo unido haber frenado el fraude”.
Manifestantes en Santa Cruz incendiaron el miércoles las oficinas de la fiscalía local, unas del gobierno y el domicilio del ministro de Obras Públicas en protesta por la detención. También se produjeron choques con la policía que no dejaron heridos.
Los exjefes de Estado bolivianos Jeanine Añez (2019-2020) y Jorge Quiroga (2001-2002), del mismo bando político de Camacho, así como Carlos Mesa (2014-2018), condenaron la detención del gobernador.
Añez también fue acusada de los mismos cargos que Camacho y sentenciada a 10 años de prisión en junio.
Simpatizantes del gobierno socialista del actual presidente Luis Arce, delfín de Morales, saludaron no obstante la detención de Camacho.
“La justicia debe operar sobre este sujeto”, dijo el procurador general del Estado y exministro de Morales Wilfredo Chávez.
Camacho fue clave en impulsar la salida de Morales de la presidencia en 2019, tras 14 años en el poder.
Ha negado en reiteradas ocasiones haber fomentado un golpe de Estado y prefiere hablar de una rebelión popular contra Evo Morales, a quien acusa de haber amañado las elecciones presidenciales de 2019 para mantenerse en el poder.
La misión electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) concluyó que hubo “manipulación dolosa” e “irregularidades graves” en los comicios de 2019 en Bolivia, y señaló la imposibilidad de validar los resultados.
El reelecto presidente Evo Morales renunció en medio de una convulsión social luego de que las fuerzas armadas le urgieran a dejar el poder.
AFP