Dice el viejo adagio popular “Año Nuevo, vida nueva”, y en Venezuela podemos decir, en este recién nacido 2023, que “Año Nuevo, liderazgo nuevo”.
Es hora que en Venezuela se produzca una gran relevo, por hombres y mujeres que representen una nueva forma de hacer política y una nueva forma de gobernar.
Es hora que la dirigencia que ha estado conduciendo a la oposición venezolana acepte lo inevitable que una nueva dirección política, con ideas y concepciones liberales, se haga cargo.
Este es el momento que –por ejemplo– esa jefatura de oposición que ha tomado las decisiones de los factores democráticos durante los últimos 20 años, se mida en unas elecciones primarias limpias para que compruebe que la ciudadania exige y necesita un nuevo liderazgo.
Es la ocasión oportuna para que los dirigentes que intentaron por más de 20 años derrotar al sistema imperante en Venezuela, y no alcanzaron los objetivos, admitan que los venezolanos reclaman que otros hagan lo que ellos no pudieron.
Por más de dos décadas los venezolanos hemos observado las mismas estrategias y los mismos fracasos.
Solo unos pocos entendieron que debían dar paso a otras personas, sin embargo la mayoría se enquistó en el usufructo del poder político-partidista de la misma forma que el modelo político que nos desgobierna.
Es hora que ellos que condujeron a la oposición por dos décadas entiendan que no pudieron, que tuvieron más de una oportunidad y no fueron capaces de lograr la libertad y el progreso del pais.
Es la hora de un nuevo a liderazgo dentro de la oposición y en el gobierno; un liderazgo que tiene nombre y apellido: María Corina Machado. Así de sencillo.
Ella es la llamada a tomar el timón de ese barco que se llama la oposición venezolana, que ante los últimos acontecimientos es más que evidente que se encuentra a la deriva.
Ella es capaz de hacer lo que la dirigencia opositora durante mas de 20 años no pudo hacer, es decir, derrotar a Nicolás Maduro.
Este es el momento para que Venezuela entera cambie para mejor; que un gran relevo tome las riendas de la nación. Es tiempo que los socialismos –de un color y de otro– sean desplazados de una vez por todas.
Necesitamos un nuevo liderazgo que gobierne a Venezuela con nuevas ideas, con nueva visión y con una orientación diametralmente opuesta al socialismo; Venezuela necesita un gobierno liberal conducido por una mujer de guáramo, como María Corina Machado.
Ruego a Dios que esté 2023 sea el año del gran relevo político en Venezuela; sea el año en que podamos tener una nueva dirigencia política más honesta, más firme, más decidida y empática.
Pido a Dios que los actores de la política sigan el ejemplo que en su momento dio ese gran sacerdote, hombre y Papa, Benedicto XVI, quien sabiéndose que ya no podía, tomó la decisión de separarse del pontificado activo, una acción de amor, honestidad y lealtad por encima del interés particular.
Sé que es pedir mucho, pero nunca está demás ser optimista.
¡Feliz Año Nuevo a todos mis lectores!