Joe Biden acababa de ganar las elecciones presidenciales frente a Donald Trump, pero el republicano desde el primer minuto apuntó a un fraude electoral y multitud de seguidores apoyaron la versión del ya ex presidente y comenzó un clima de gran crispación.
De hecho, el 6 de enero de 2021 en el Capitolio estaban reunidos los legisladores para declarar a Biden vencedor oficial e iniciar así su legislatura, pero entonces miles de seguidores de Trump irrumpieron de forma violenta en el Capitolio.
CINCO MUERTOS
Las múltiples quejas de Trump y acusaciones de fraude electoral junto con su discurso de odio y violencia avivó a una marabunta de personas que irrumpió en la sede parlamentaria con el objetivo de frenar el nombramiento de Biden y así “recuperar el país”.
Dentro del Parlamento había senadores, personal de seguridad, trabajadores habituales…en cuestión de minutos toda una multitud entró por la fuerza. Fue algo tan inédito y por sorpresa que los policías no pudieron frenar la entrada de tantas personas y se activaron los protocolos de seguridad para proteger a los senadores y a los líderes del país, que se encontraban en la sala en esos momentos.
Entonces comenzó una batalla campal en el Capitolio entre los agentes de seguridad, policías y seguidores de Trump.
Se vivieron momentos de mucha angustia durante las 3 horas que duró el asalto. Norma Torres, una de las congresistas que se encontraba en ese momento en el Capitolio, ha relatado a RTVE el fuerte pánico que se vivió.
“Estábamos viendo cómo estaban escoltando a todo el mundo. Y nos mirábamos unos a otros preguntándonos ‘y nosotros qué’. Mirábamos las puertas cerradas y pensábamos ‘para nosotros no hay salida’. En algún momento empezamos a comentar si sería posible saltar abajo, desde el balcón”, ha recordado Torres.
También han podido hablar con policías que defendieron las instalaciones, como Michael Fanone, que según recoge RTVE estaba en el departamento antidroga, pero decidió acudir al Capitolio al enterarse de que sus compañeros estaban desbordados.
“Me golpearon con puños americanos y objetos metálicos. Y en un momento dado me dispararon con una pistola eléctrica, muchas veces, en el cuello y en la base del cráneo”, ha relatado.
Los hechos acabaron con la vida de 5 personas y 140 heridos. Uno de los fallecidos fue un policía que acabó muriendo como consecuencia de las heridas provocadas por los asaltantes.
TRUMP, EN EL OJO DEL HURACÁN
En estos 2 años se ha detenido a unas mil personas por estos hechos y algunas se enfrentan a cargos de sedición o conspiración, penados con penas de prisión.
Incluso el entonces presidente, Donald Trump, sigue en el ojo del huracán por lo ocurrido, pues una Comisión de la Cámara de Representantes creada para esclarecer lo ocurrido abogó en su informe final por el procesamiento penal del ex presidente por 4 delitos, entre los que se incluye el de insurrección.
El comité considera que Trump pudo frenar a la multitud, que estaba a su favor y se movilizaba para que su rival electoral no fuera proclamado presidente electo. Si bien no tiene pruebas de que Trump lo promoviera, concluye que no evitó el asalto porque “le convenía” y que estuvo toda esa tarde “viéndolo por televisión”. Sí reconoce que, horas después, y ante la gravedad de los hechos y la presión de su entorno, lanzó un mensaje pidiendo a estos asaltantes desalojar el Capitolio.
Video: Reporta, Belen Mora, Voz de América, desde Washington
