El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, llamó hoy a “luchar” por los rusos que se han marchado del país y que no han caído en una actitud hostil hacia Rusia.
“Todos ellos son nuestros ciudadanos y pudieron tener distintos motivos para irse del país. Pero aquellos que no han caído en una actitud hostil hacia nuestro país son ciudadanos nuestros, por los que tenemos que luchar”, dijo Peskov en declaraciones al digital Life.ru.
Preguntado por la propuesta del presidente de la Duma o Cámara de Diputados, Viacheslav Volodin, de confiscar los bienes de los rusos que se han marchado al extranjero y denigran al país y sus militares, el portavoz de la Presidencia rusa admitió que se trata de un asunto de actualidad, aunque se mostró cauteloso.
“Sin duda, es un tema muy complejo, actual en nuestro tiempo, pero en esto no se puede abrir la caja de Pandora. Los enemigos son enemigos, pero todos los demás son nuestros ciudadanos y deben seguir siéndolos”, subrayó.
En Rusia -dijo-, “debemos hacer de tal manera que los que se marcharon y no son nuestros enemigos regresen”.
Volodin recalcó que las declaraciones contra el país y su militares pueden ser consideradas “llamamientos al extremismo, rehabilitación del nazismo o desprestigio de las Fuerzas Armadas”, delitos contemplados en el Código Penal de Rusia.
“Como muestra la práctica, las existentes medidas de respuesta (a estos delitos) son insuficientes”, indicó.
El jefe del Legislativo agregó que “los canallas que se marcharon viven cómodamente” gracias a Rusia y a los ingresos que reciben desde el país, y al mismo tiempo “se permiten denigrar públicamente a Rusia” e insultar a sus soldados y oficiales.
“En esta situación lo apropiado será incluir en los respectivos artículos del código penal la confiscación de los bienes que los canallas poseen en Rusia, que son suficientes para compensar el daño causado”, subrayó.
EFE