El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, se reunió este viernes con representantes de la comunidad venezolana en Argentina, a quienes transmitió su repudio a la visita del dictador Nicolás Maduro para la próxima cumbre de la CELAC.
En el encuentro participó la activista por la democracia, Elisa Trotta Gamus; el secretario de Asuntos Públicos porteño, Waldo Wolff; el secretario de Relaciones Internacionales, Fernando Straface; y el presidente de la Legislatura porteña, Emmanuel Ferrario.
Durante la reunión, Larreta expresó su solidaridad con quienes han llegado a la Argentina huyendo de la dictadura chavista y reafirmó que la Ciudad de Buenos Aires tiene sus puertas abiertas para los migrantes y refugiados venezolanos.
“Rechazamos contundentemente la visita de Maduro. No podemos naturalizar ni permitir que el Presidente abrace dictadores. Su presencia en suelo argentino es una provocación injusta y dolorosa para los venezolanos, cubanos y nicaragüenses. Y también es una señal peligrosa para el mundo. La democracia es un elemento clave para el desarrollo y hay que defenderla siempre, sin doble vara y sin poner la ideología por encima de lo que está bien”. afirmó Larreta.
Recordó que con el retorno de la democracia, Argentina se posicionó a la vanguardia en materia de defensa de los derechos humanos en América Latina.
“Hoy, el gobierno decide sentar a la mesa de debate regional a tres dictaduras. Como argentino, me duele y me preocupa. El Gobierno nacional tiene que dejar de mirar para un costado y denunciar, de una vez por todas y de forma categórica, las continuas violaciones a los derechos humanos en esos países. Solo así vamos a poder fortalecer la democracia en la región y garantizar el bienestar y la seguridad de todos sus ciudadanos“, sostuvo.
Trotta Gamus destacó la importancia de defender la democracia frente al avance de los autoritarismos. Repudió que el Gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner pretendan ensuciar las banderas de derechos humanos que históricamente ha levantado Argentina invitando a los dictadores de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
“Todos los que hacemos vida en Argentina debemos repudiar que se pretenda recibir con honores, con una alfombra roja, a dictadores que tienen las manos manchadas de sangre, a criminales de lesa humanidad que violan sistemáticamente los derechos humanos de sus ciudadanos”, expresó.
La activista recordó que esta semana desde el Foro Argentino por la Democracia en la Región (FADER) han impulsado una denuncia penal en contra de Nicolás Maduro, Miguel Díaz-Canel y Daniel Ortega, para que la Justicia argentina investigue los delitos de lesa humanidad cometidos por dichos regímenes.
Nota de Prensa