El presidente estadounidense, Joe Biden, contempla nuevas acciones para proteger el acceso legal a la medicación abortiva y salvaguardar la seguridad del paciente ante las barreras surgidas desde que el Supremo revocara el pasado junio la protección del derecho a abortar a nivel federal, informó este domingo la Casa Blanca.
En el 50 aniversario de la sentencia ‘Roe contra Wade’ (1973), que protegió ese derecho en Estados Unidos pero fue derogada en junio del año pasado, el mandatario firmará un memorando en el que pedirá al secretario de Sanidad, Xavier Becerra, que incremente los esfuerzos para que entre otros puntos se puedan comprar píldoras abortivas en farmacias “sin amenazas ni violencia”, independientemente de donde se viva.
La Casa Blanca subrayó que el presidente “ha dejado claro desde hace mucho tiempo que las personas deben tener acceso a servicios reproductivos sin acoso, amenazas o violencia” y que “las farmacias no deben recibir un trato diferente”.
El memorando que firmará Biden con esas medidas será anunciado públicamente este domingo por la vicepresidenta, Kamala Harris, en un acto en la capital de Florida, Tallahassee, para conmemorar los 50 años del histórico fallo de la Corte Suprema.
La Administración demócrata escogió significativamente para este acto el estado de Florida. Su gobernador, Ron DeSantis, promovió leyes restrictivas de los derechos reproductivos incluso antes de la sentencia del Supremo.
Desde ese fallo, según datos de Planned Parenthood, la mayor red de clínicas de servicios reproductivos de EE.UU., 18 estados han prohibido el aborto o lo han restringido severamente, y en 13 de ellos el acceso a ese servicio es en la práctica imposible aunque haya excepciones.
En Estados Unidos la píldora abortiva Mifepristone es responsable de “la mayoría” de interrupciones voluntarias del embarazo en todo el país, según la Casa Blanca.
El comunicado presidencial apuntó que el memorando busca contrarrestar las barreras que algunos oficiales estatales han implementado para evitar que las mujeres accedan a pastillas abortivas y que las farmacias las ofrezcan. EFE