Una central eléctrica flotante turca arribó a la bahía de La Habana para “apoyar la generación” en Cuba, informó este miércoles el Ministerio de Energía y Minas.
Esta instalación, con una capacidad de 240 megavatios (MW) es la octava de su tipo contratada por Cuba a la empresa turca Karandeniz Holding.
Las centrales flotantes complementan a las termoeléctricas (CTE), que generan más de la mitad de la energía que se consume en la isla.
La mayoría de las 8 CTE de Cuba operan con más de 40 años de explotación, cuando la edad media es de 30 años.
En noviembre pasado, arribó a la capital insular el buque MV Karadeniz Powership Irem Sultan con una central con capacidad de 110 MW.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, viajó en noviembre a Turquía como parte de una gira internacional que también lo llevó a Argelia, China y Rusia.
En el viaje se abordaron “temas esenciales” para la isla “relacionados fundamentalmente con el sector electroenergético”, según informó el mandatario.
Los apagones -por roturas y fallos en las anticuadas plantas termoeléctricas, la falta de combustible y los mantenimientos programados- son habituales desde hace varios meses en la isla, aunque desde finales de 2022 estos han disminuido.
El Gobierno ha reconocido que habrá más apagones en los primeros meses de 2023 pero que tendrán una menor duración. Durante el año pasado los apagones superaron las 10 horas diarias en algunas localidades de la isla.
EFE