El futbolista de 39 años cumple un mes en la cárcel tras ser acusado de una agresión sexual contra una joven en Barcelona.
Por infobae.com
Hoy, 20 de febrero, se cumple un mes de que Dani Alves fue detenido y llevado al centro Brians 2 por decisión de la Justicia luego de ser acusado por una joven de 23 años de agresión sexual en la discoteca Sutton, de Barcelona. En ese tiempo, el experimentado defensor cambió en cuatro oportunidades su discurso y en última instancia confirmó que existió el acto sexual entre las partes, que según él fue “consentido”.
Después de los rumores de un supuesto pedido de divorcio de parte de su actual esposa, la modelo Joanna Sanz, en El Programa de Ana Rosa contaron sobre una charla entre ambos en la que el histórico lateral derecho le habría confesado lo que realmente sucedió según la versión del futbolista. Las llamadas telefónicas habrían sido dos y en una de ellas, Alves le dijo que le pedía perdón por lo ocurrido y que “no recuerda nada de aquella noche porque estaba ebrio”, comentaron en el programa de la TV española.
A la espera de la definición de la Audiencia de Barcelona, la defensa de Alves a cargo del abogado Cristóbal Martell buscará desmontar lo que considera una “distorsión narrativa” sobre lo sucedido aquella madrugada del 30 de diciembre en una reconocida disco de la ciudad catalana.
Martell entiende que la investigación iniciada por los Mossos d’Esquadra -las fuerzas de seguridad de Cataluña- fue “tendenciosa” porque los videos no demuestran que la chica haya estado bajo una situación de “terror, pavor o dominación” como indican los reportes sobre el momento de la supuesta agresión en el baño del salón VIP donde estuvieron los dos protagonistas del hecho.
En la investigación que hicieron los forenses se encontraron restos de ADN de Alves en el piso del baño, en la ropa de la supuesta víctima y fluidos luego de la relación sexual, datos que complican la situación procesal del jugador que más títulos ganó en la historia.