Recientemente expertos de la Universidad de Cambridge aseguraron que el calentamiento global podría desencadenar una guerra nuclear, una crisis financiera o una pandemia de extinción en menos de 50 años y también se dio a conocer que la Tierra se enfrenta a una muerte masiva de especies desde este año a 2100, la cual podría acabar con más de una cuarta parte de la biodiversidad mundial, según cálculos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Para tratar de entender las repercusiones de la crisis climática, así como si las preocupaciones de algunas personas son fundamentadas o no, El Heraldo Digital platicó con Samanta Diana Jaime Muñoz, docente de Biología, Ecología, Geografía y Química, en Bacalar, Quintana Roo.
En la historia de la Tierra se han documentado por lo menos cinco extinciones masivas, la más reciente hace 65 millones de años al final del período Cretácico, las causas de las pasadas extinciones han sido identificadas como cambios dramáticos en el clima debido a la actividad geológica. “Varios investigadores consideran que los impactos actuales de las actividades humanas nos están llevando a la sexta extinción masiva”, señala la Conabio en su página web.
La extinción masiva es una realidad
Jaime Muñoz sostuvo que las tasas de extinción actualmente son mucho mayores a las que ocurrieron antiguamente considerando la escala geológica, sin embargo, anteriormente sucedían por condiciones o cambios naturales, en la actualidad los procesos se han visto acelerados por la intervención humana.
“Los seres humanos metemos una presión extra en los ecosistemas, entonces la extinción se acelera… Por ejemplo lo que ocurrió con los búfalos en Estados Unidos en cuanto empezaron a cazarlos, lo que hizo que desapareciera la población… Además, el problema se agudiza por el cambio climático, cuyos efectos son bastante dramáticos en los ecosistemas”, refirió.
Hay que recordar que la Tierra se ha enfrentado a cinco extinciones masivas a lo largo de su existencia.
La temperatura se ha elevado
Los ocho últimos años fueron los más cálidos jamás registrados, confirmó esta semana la Organización Meteorológica Mundial (OMM), pese a la persistencia del fenómeno de La Niña que permitió moderar de forma temporal los efectos del calentamiento climático.
Para seguir leyendo, clic AQUÍ.