El padre de un joven alcoholizado destrozó el lujoso vehículo de su hijo, que estaba estacionado en la calle, para evitar que condujera y provocara un grave accidente. Con un pico de obra, abolló la chapa y rompió los cristales de un BMW. Según argumentó, era para evitar que su hijo manejara borracho.
Por: Clarín
La particular situación ocurrió en Logroño, España. Luego de una denuncia, la policía local detuvo a una camioneta que era conducida por un hombre de 60 años.
La sorpresa llegó cuando los agentes comprobaron que el conductor y su acompañante, que mostraba signos de evidente embriaguez, eran un padre y su hijo de 32 años. El coche destrozado era propiedad de este último.
Proteger a su hijo
La declaración del padre a los agentes hizo hincapié en que había tratado de convencer a su hijo para que le entregase las llaves del auto y evitar así que condujese, dado su estado de embriaguez, lo que motivó una discusión entre ambos.
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