Seúl comenzó a compilar informes anuales sobre los presuntos abusos de derechos humanos de Pyongyang en 2018 luego de la promulgación de las Leyes de derechos humanos de Corea del Norte en 2016.
Corea del Norte ejecutó a una mujer embarazada de seis meses y llevó a cabo experimentos humanos con personas con enanismo, afirma un informe de Corea del Sur. El gobierno anterior de Corea del Sur, encabezado por Moon Jae-in, de tendencia liberal, evitó hacer públicos los informes debido a lo que vio como la necesidad de proteger las identidades de los desertores norcoreanos que testificaron.
Por Metro y Daily Mail
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El actual presidente del país, el más conservador Yoon Suk Yeol, expresó el deseo de su administración de “exponer completamente” las “espantosas violaciones de los derechos humanos” del Norte. En un movimiento que seguramente enfurecerá al déspota Kim Jong-un y su régimen, el ministerio reveló su informe anual al público por primera vez, ya que tiene como objetivo destapar los abusos de los derechos humanos “espantosos” del Norte.
Las personas discapacitadas también han sido esterilizadas a la fuerza por el estado, y los ciudadanos han sido condenados a muerte por ser homosexuales y por su religión, afirma el informe.
Más de 500 norcoreanos que lograron huir del país hablaron de los horribles abusos contra los derechos humanos entre 2017 y 2022 en un extenso informe de 450 páginas publicado ayer por el Ministerio de Unificación de Corea del Sur.
El derecho a la vida de los “ciudadanos de Corea del Norte parece estar gravemente amenazado”, dijo el ministerio en el informe. “Las ejecuciones se llevan a cabo de forma generalizada por actos que no justifican la pena de muerte, incluidos los delitos relacionados con las drogas, la distribución de vídeos de Corea del Sur y las actividades religiosas y supersticiosas“.
También escucharon testimonios de enfermeras obligadas a redactar una lista de personas con enanismo para poder realizarles histerectomías, un procedimiento quirúrgico para extirpar su útero y evitar que tuviera un hijo, en 2017.
Una mujer embarazada de seis meses fue ejecutada después de hacer un video de ella bailando mientras señalaba un retrato de Kim Jong-Un mientras bailaba. Y un grupo de adolescentes presuntamente fueron ejecutados por un pelotón de fusilamiento después de ver un video de Corea del Sur y fumar opio.
El informe también detalla que el Ministerio de Seguridad Social de Corea del Norte chantajeó a las familias para que permitieran que sus parientes participaran en experimentos con humanos, con la amenaza de enviarlos a campos de prisioneros.
Se informó que los sujetos humanos habían sido alimentados en secreto con pastillas para dormir y llevados a la fuerza a una instalación llamada Hospital 83 para someterse a varios experimentos.
Los centros de detención presenciaron frecuentes muertes y torturas. Las prisioneras también fueron tratadas con especial dureza, ya que fueron objeto de tortura, trabajos forzados, violencia sexual y hambre..
Cinco de los 11 campamentos identificados por Corea del Sur todavía están en funcionamiento.
El informe se produjo cuando Corea del Sur busca resaltar el fracaso de su vecino aislado para mejorar las condiciones de vida mientras se apresura a aumentar sus arsenales nucleares y de misiles.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró que el informe debería informar mejor a la comunidad internacional sobre los abusos “espantosos“ del Norte, diciendo que Corea del Norte no merecía “ni un solo centavo” de ayuda económica mientras persigue sus ambiciones nucleares.
El Ministerio de Unificación está obligado por ley a realizar una evaluación anual de la situación de los derechos del Norte.