Ya el 22 de marzo un grupo de trabajadores había marchado desde el Centro Total de Entretenimiento (CTE) Cachamay hasta la sede matriz de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG). En esa oportunidad, denunciaron que el entonces presidente de la CVG, Pedro Maldonado, había desincorporado hace más de 3 años al sindicato de la construcción de todos los trabajos de las empresas.
Pableysa Ostos / Corresponsalía lapatilla.com
Transcurrieron 22 días después de esa y el escenario era el mismo, pero el motivo de la concentración era otro. En esta oportunidad fue para agradecer la llegada de una junta interventora a la corporación tras la detención de Maldonado y varios de directores, pero también para entregar unas solicitudes.
El presidente del Frente Unido Trabajadores Socialistas del estado Bolívar, Josué Tremaria, advirtió: “Nosotros teníamos rato denunciando lo que estaba pasando dentro de la CVG y ahora estamos celebrando este triunfo”.
“Es importante que se den las reuniones que van a dar salida a los empleos, salida a esta situación a la que nos llevó esta dirigencia que estaba al frente de las empresas básicas, conjuntamente los dirigentes de la CVG con los presidentes de las básicas. Por eso hoy los trabajadores de Guayana no vamos a permitir más que sean vulnerados nuestros derechos. Estamos contigo, Nicolás, pero también vamos a reclamar nuestros derechos. Por eso esta junta interventora, bienvenida a la ciudad, y cuente con esta clase obrera para seguir trabajando y seguir haciendo y construyendo el país y el estado que todos merecemos”, expresó Tremaria desde las afueras de la CVG.
Destacaron que entre las peticiones está el respeto a las dirigencias sindicales “electas legalmente y constituidas legalmente dentro de las empresas básicas, así como también desde el sector construcción, que es el que represento. Hay trabajos, hay obras como lo es la que está en Sidor, Tocoma, entre otras, también obras de mantenimiento dentro de las empresas básicas, que por muchos años ha sido el sector construcción el que aumentó las capacidades instaladas de dichas empresas”.
Tremaria detalló que ya tenían más de 3 años “luchando” con la CVG que, según el sindicalista, cercenó el derecho de los trabajadores, les trancaron los portones. Pero también denunció que tras la marcha del pasado 22 de marzo, rodaron “rumores” sobre una presunta orden de aprehensión contra él.
A esta junta interventora liderada por Héctor Silva Hernández y Alexis Rodríguez Cabello, los trabajadores le solicitaron que respeten la autonomía sindical y que se habiliten las elecciones de cada uno de los dirigentes sindicales, “porque todos los sindicatos que hacemos vida en la ciudad están vencidos. Vamos hacerlas en todas las empresas básicas”.
También pidió oportunidades de empleos y la reincorporación de los trabajadores. “Ya no queremos más teorías, queremos intervención en todas las empresas básicas”, sentenció Tremaria.
Piden ingreso de sindicatos a las plantas
El secretario de trabajo y reclamo, Leonardo Azócar, destacó que este 12 de abril debía darse respuestas al ingreso de todos esos trabajadores que están en calidad de no requeridos, con jubilación anticipada, entre otros, a sus puestos dentro de la planta, “para que de alguna manera haya de verdad la producción que queremos. Vamos a seguir luchando por que esas empresas básicas se mantengan productivas y seguimos luchando para que nuestra convención colectiva se respete”.
“Nicolás Maduro, escucha a la clase obrera. No estábamos de acuerdo con que la producción se fuera por el puente de Guanta, entre otros, y ese dinero se iba a los bolsillos de Pedro Maldonado, que era el presidente de la CVG, y al bolsillo de los diferentes presidentes de las empresas básicas. Nosotros somos la alternativa no petrolera de este país, los trabajadores de Guayana somos los que producimos acero, aluminio, briquetas, y que esas ganancias puedan ser repartidas al pueblo de Guayana y a todos los trabajadores con un salario digno para poder tener una manutención buena para nuestras familias”, sumó Azócar.
El dirigente sindical le pidió a la junta interventora vaya a las empresas básicas. “Hablar de la mano con los trabajadores, escuchar a los trabajadores y escuchar a la verdadera dirigencia sindical. A partir de hoy les decimos que si de verdad vinieron a trabajar con los trabajadores y con el sindicato, desde hoy tienen que autorizar la entrada de los sindicatos, porque si en esos momentos hubiera estado la dirigencia sindical dentro de la planta, hoy no estuviera pasando esa gran corrupción que ocurrió en la CVG. Vamos a seguir en esta lucha permanente hasta que se reconozcan nuestros beneficios”.
Junta atendió a sindicatos
Tras estar varias horas concentrados a las afueras de la CVG, Silva Hernández y Rodríguez Cabello salieron a conversar con los dirigentes sindicales y los trabajadores que los acompañaban. Según expresó Silva, una de las instrucciones que le dio Maduro fue la de producir “para el Estado, producir para Guayana, producir para los trabajadores”.
“Esperamos contar con ustedes, porque ustedes cuentan con nosotros. Ya empezamos hacer un levantamiento de información, hemos venido trabajando en las diferentes empresas, diferentes visitas para escuchar a todos y cada uno de los trabajadores. La idea es poder escuchar y relacionarnos con los trabajadores, porque esto es una gestión del pueblo, esta es una gestión de los trabajadores y trabajadoras. Estamos muy emocionados de contar con su presencia en esta corporación, que es de todos ustedes. Tenemos que ponernos a producir, la idea ahora es que este producto ingrese en beneficio y producción para los trabajadores y el estado”, puntualizó Silva, presidente de la CVG.
No destacó cuáles serán esos mecanismos para poner a producir las empresas básicas, si está contemplada alguna inversión por parte del Estado para esas empresas, las cuales tienen años tratando de superar una crisis de seguridad.
Los trabajadores no cuentan con los equipos e indumentarias necesarias para laborar. Hay fallas en mantenimiento, piezas y equipos. Con números alarmantes en cuanto a producción, otras con inoperatividad y una gran cantidad de trabajadores fuera de las empresas básicas por estar en la lista de los “no requeridos”.