Sin previo aviso y sin explicaciones el juez que procesa a los hermanos Andrés Felipe y Ramón Emilio Pérez Hoyos por el crimen del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, decidió declarar reservada la audiencia del pasado 12 de abril.
Por eltiempo.com
Los medios que estaban cubriendo el caso fueron expulsados de la plataforma virtual y es poco lo que se sabe qué ocurrió después. Lo único que trascendió es que el próximo 3 de mayo se dictará sentencia contra los hermanos, que aceptaron haber sido los articuladores del asesinato del fiscal antimafia, ejecutado el 10 de mayo de 2022 en las playas de Barú (Colombia).
Lo que se alcanzó a transmitir de la audiencia es que, tras pedirle perdón a la familia del fiscal paraguayo, los hermanos Pérez Hoyos anunciaron que ya habían conseguido a una abogada de su absoluta confianza: Yésica Troncoso. de hecho, la abogada de oficio fue desplazada del caso al inicio de la audiencia.
La penalista pidió entonces aplazar la diligencia bajo el argumento de que no había sido notificada y porque estaba sosteniendo conversaciones con la Fiscalía para una efectiva colaboración en la entrega de información que conduzca al esclarecimiento del homicidio.
“Recibo una llamada anoche del fiscal avisándome de la repentina audiencia”, dijo la abogada y recordó que hay diligencias para los días 12, 13 y 14 de abril con los hermanos Hoyos y con Márgaret Chacón, la esposa de uno de ellos (Andrés), autorizadas por el fiscal del caso Mario Burgos, quien viajó a Cartagena para estar presente en la diligencia.
La abogada también señaló que no había podido asesorarlos en debida forma.
En ese momento, los periodistas que quedaban fueron sacados y el juez, sin dar argumentos previos, declaró la audiencia reservada y prohibió que lo que se hablara trascendiera.
A pesar de las advertencias, EL TIEMPO estableció que, desde el 21 de febrero, la defensa de los hermanos Pérez Hoyos se han reunido con el fiscal Burgos y le ha enviado oficios y correos.
Las dos peticiones confidenciales
De hecho, hay un correo electrónico, del 23 de febrero, en el que se solicita el interrogatorio en el que los Pérez Hoyos entregarían información, petición que se reiteró los primeros días de marzo. Y hubo un nuevo encuentro de la defensa y Burgos el pasado 21 de marzo.
El fiscal Burgos advirtió que las ofertas de colaboración no se han concretado y que es una mera expectativa: “No sé si la información que ofrecen es o no relevante“.
Por su parte, el juez del caso advirtió que no había recibido poder de la abogada y que por eso no se le habían enviado comunicaciones. Y le recordó que la ley indica que lo que viene es la sentencia, después de que sus clientes aceptaron cargos: “No veo las razones por las cuales no se pueda continuar”.
A pesar de la advertencia, los hermanos aseguraron que estaban frente a una poderosa organización criminal y que tenían miedo de hablar.
Sentencia en mayo
No obstante, aceptaron reunirse con el fiscal Burgos no sin antes pedir protección para un allegado que se encuentra en el extranjero.
Además, Andrés Pérez Hoyos aseguró que su esposa, Márgaret Chacón
-capturada en El Salvador, como lo anticipó EL TIEMPO-, no tenía nexo alguno con el crimen y que su presencia en algunos lugares era circunstancial.
Tanto el juez como la Fiscalía accedieron a que los procesados se reúnan con el representante del ente acusador en los próximos 20 días.
No obstante, el juez anunció que dictará sentencia contra los Pérez Hoyos en audiencia inicialmente programada para el 3 de mayo próximo, casi un año después del asesinato.