Conmocionados están los vecinos del urbanismo Valle Real en el sector Tipuro, zona norte de Maturín, luego del crimen ocurrido la tarde de este jueves en el que una mujer fue asesinada brutalmente por su hijo.
Corresponsalía lapatilla.com
La víctima respondía al nombre de Francis Gil, de 55 años, quien fue atacada con una pala de albañil por su hijo identificado como Santiago Lucas Gil, de 24 años de edad, y luego la cortó en reiteradas oportunidades con un serrucho, ya que pretendía desmembrarla.
Versiones de los vecinos señalan que desde la casa A-18 se escuchaban gritos que podían oírse a varias cuadras, y pese a los continuos llamados a la policía, la respuesta “fue muy tardía”.
Una vecina de la zona contó que desde el pasado domingo, la mujer y el ahora homicida estaban discutiendo constantemente, pero nunca imaginaron que pudiera ocurrir este terrible crimen.
Francis se desempeñaba como peluquera y usaba un bastón para apoyarse por una dificultad que tenía para caminar.
Cuentan, además, que una vez que se dejaron de escuchar los gritos, llegó un grupo de cristianos evangélicos a tocar la puerta a los pocos minutos. “Santi”, como también era conocido el victimario, salió con una Biblia diciendo que había matado al demonio.
Al mismo tiempo, se presentaron efectivos policiales y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas para hacer el levantamiento del cadáver y colectar evidencias, donde encontraron las armas que usó el homicida.
El sujeto, una vez fuera del inmueble, confesó haber asesinado a su progenitora y los funcionarios policiales procedieron a esposarlo para llevarlo a un centro de detención, donde se espera sea presentado ante el Ministerio Público en las próximas horas.
Se presume que el hombre estaba bajo efectos de las drogas, ya que anteriormente había sido detenido por posesión de sustancias ilícitas, así como por hurtos en la zona.