Anna Nicole Smith sabía como hacer para no pasar desapercibida. Tuvo una vida envuelta en escándalos. Nació en un pequeño pueblo de Texas, fue madre soltera muy joven. Pero detrás de ese origen humilde soñaba en grande, muy en grande.
Por: Clarín
A los 26 años, en 1995, se casó con un magnate petrolero de 89, que falleció un año después de contraer matrimonio con ella. Además, terminó sin herencia después de una larga lucha judicial. Según Forbes, Howard Marshall tenía un patrimonio de 12.000 millones de dólares. El caso es reflejado es una serie que estrenó Netflix hace un mes.
Anna Nicole Smith, cuyo verdadero nombre era Vickie Lynn Hogan, nació el 18 de noviembre de 1967 en Houston, Texas. Su vida estuvo llena de drama. Abandonó la escuela secundaria, se casó a los 17, tuvo su primer hijo a los 18 y se separó a los 19.
Smith trabajó en Walmart y Red Lobster antes de conseguir el que cambiaría su vida: bailarina en Gigi’s Cabaret. Ella contó que allí conoció a su futuro marido, Howard Marshall, entonces de 86 años, quien fue llevado en silla de ruedas al club una noche de 1991 para verla desnudarse. Marshall estaba deprimido, dicen sus amigos, luego de la muerte ese año de dos mujeres centrales en su vida: su esposa, Bettye, y su amante, Lady Walker, de 51 años. Se refirió a este último como “lo más trágico que me pasó”.
A fines de sus 80, Marshall era rico, luego de años de éxito. Sus grandes movimientos de dinero se produjeron en las décadas de 1950 y 1960. Casi toda esta historia tuvo lugar antes de que naciera Anna Nicole Smith. La fortuna del empresario estaba valorada en 12.000 millones de dólares.
Smith dijo que Marshall gastó alrededor de mil dólares en ella la primera noche que se conocieron. Al día siguiente, la invitó a reunirse con él en una habitación de hotel para almorzar. Después de eso, él le dio un sobre lleno de dinero en efectivo y le dijo que no tenía que volver a bailar en el club.
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