Investigador denuncia que Maduro ha recaudado cientos de millones de dólares con venta ilegal de oro

Investigador denuncia que Maduro ha recaudado cientos de millones de dólares con venta ilegal de oro

Imagen de archivo. Mineros ilegales trabajan dentro de un túnel excavado en el suelo para encontrar oro en un campamento improvisado para la minería ilegal cerca de El Callao, en el estado Bolívar, en el sur de Venezuela (REUTERS/Carlos Garcia Rawlins)

 

 

El investigador y presidente de IBI Consultores y especialista en los vínculos que mantienen algunos gobiernos, el narcotráfico y los grupos terroristas, Douglas Farah, advirtió que Venezuela y Latinoamérica se enfrenta a un “sinfín de retos transversales y transfronterizos”, así lo reseñó INFOBAE.





El experto presentó este miércoles ante la Cámara de Representantes de EEUU un balance sobre las actuales amenazas que las organizaciones delictivas transnacionales representan para el continente americano y pidió mayor atención a la influencia de China, Irán y Rusia en la región.

Farah denunció que el régimen de Maduro en Venezuela ha recaudado cientos de millones de dólares a través de la venta de oro extraído ilegalmente, a menudo con el apoyo o acciones por poder de actores armados no estatales colombianos afiliados a diferentes grupos de las facciones disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Asimismo, manifestó que el tráfico ilícito de recursos naturales no sólo abre nuevas vías de ingresos para las organizaciones delictivas transnacionales y para el blanqueo de dinero, sino que es uno de los principales responsables de la degradación masiva del medio ambiente, los riesgos para la salud, el trabajo infantil, la trata de seres humanos y la pérdida de legitimidad del Estado. “La mercancía más lucrativa es el oro -especialmente el oro extraído ilegalmente-, un comercio en gran medida no regulado que está en auge en todo el hemisferio, desde Venezuela, Colombia, Ecuador, Guyana y, en el norte, hasta las regiones de Madre de Dios de Perú y Bolivia y la cuenca del Amazonas en Brasil”, dijo.

Imagen de archivo del periodista estadounidense Douglas Farah, especialista en crimen internacional organizado y presidente de la consultora IBI

 

“A medida que ha aumentado la presión de EEUU para detener el flujo de lo que los grupos de derechos humanos y otros llaman ‘oro de sangre’ al mercado internacional, cantidades crecientes de oro han fluido desde Venezuela, Nicaragua, Surinam, Ecuador y otros lugares hacia actores estatales y empresas criminales que operan fuera del hemisferio, incluyendo Turquía, China, Kenia, los Emiratos Árabes Unidos y otros lugares”, explicó. Y alertó que, en los últimos años, China se ha convertido en un mercado cada vez más importante para el oro extraído por el régimen de Maduro y que un grupo de intermediarios libios que tenían largos vínculos con los esfuerzos de evasión de sanciones del régimen de Khadafi en la década de 1990 son facilitadores clave en este nuevo espacio de convergencia criminal.

Farah afirmó que América Latina se enfrenta a un “sinfín de retos transversales y transfronterizos” que amenazan directamente no sólo los intereses estratégicos de Estados Unidos, sino también los pilares clave que han sustentado las alianzas de larga data en toda la región latinoamericana. “A medida que las redes ilícitas amplían su control territorial, sus ecosistemas de corrupción, su poder político y sus líneas de productos, cuentan con la ayuda y la instigación de actores extrarregionales como China, Rusia e Irán, que socavan el Estado de derecho y desafían directamente los objetivos y las iniciativas de Estados Unidos en el hemisferio occidental”, declaró ante un comité de la Cámara baja del Congreso de EEUU.

“Rusia y China consideran América Latina un escenario clave de la competencia entre grandes potencias y actúan en consecuencia. Estados Unidos debe renunciar a la autocomplacencia inherente a haber sido el socio internacional preferido de la mayoría de la región durante un siglo, y buscar nuevos compromisos creativos con sus socios. Un compromiso de mayor calidad, más amplio y más sostenido con las comunidades adecuadas contribuirá en gran medida a reforzar la democracia, la sociedad civil y la estabilidad regional”, aseveró el experto.