Cerca de 15.000 migrantes, entre ellos venezolanos, están este viernes varados en la frontera de México con Guatemala, donde afrontan lluvias y se refugian debajo de cajas de tráileres, puentes, árboles y una carpa para evitar mojarse en lo que esperan la atención de las autoridades mexicanas.
Mikel José Sánchez, venezolano que viaja con su esposa y dos niños, relató que no cuentan un techo o un lugar donde cubrirse de las lluvias registradas los últimos días, pero se mojan para esperar que les brinden la atención.
Este migrante se dedicaba junto a su familia al comercio, pero con la inflación y la crisis política migró con rumbo a los Estados Unidos.
“Lo más triste es que llovió, no tenemos un techo donde cubrir a los niños, porque hay muchos niños y la realidad es que en la tarde llueve y van a dormir con la tierra mojada, como esta madre que está aquí que no tiene con qué cubrir a sus hijos”, expuso.
Luis Rey García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana (CDH), indicó que su organización ciudadana ha documentado unos 15.000 migrantes varados en Tapachula, quienes están sufriendo los estragos de la temporada de lluvias.
“Los defensores de migrantes estamos preocupados por la situación del clima, porque hay muchos niños que se están enfermando y no hay quienes les brinden la ayuda. Si no hay atención médica para los mexicanos, menos para los extranjeros”, lamentó.
El Sistema Estatal de Protección Civil de Chiapas alertó este viernes de la presencia de lluvias intensas para las regiones Soconusco, Metropolitana, Sierra y Tulija con precipitaciones de 75 a 150 milímetros.
Bajo este panorama, otro de los migrantes, el venezolano Juliano Truisi, señaló que la situación climática en Tapachula es “horrible” porque hay mucha lluvia y todos los días se mojan y sienten demasiado frío.
“Lo que pedimos es que nos ayuden lo más rápido posible. Debe haber una medida preventiva para los niños para que no puedan mojarse cuando haya lluvia”, indicó.
El migrante suramericano estableció que las autoridades deben ayudarlos para mejorar sus condiciones en lo que esperan sus trámites.
La situación refleja el panorama en las fronteras de México tras la expiración el mes pasado del Título 42 de Estados Unidos, una medida que expulsaba de manera inmediata a migrantes con el argumento de la pandemia, reemplazada ahora con el Título 8 y mayores restricciones al asilo legal.
La región afronta un inédito flujo migratorio, con más de 2,76 millones de indocumentados interceptados por Estados Unidos en la frontera con México en el año fiscal 2022.
Con información de EFE