El opositor cubano Guillermo Fariñas, premio Sájarov 2010 del Parlamento Europeo (PE) a la libertad de conciencia, anunció este jueves el fin, a instancias de su partido, de la huelga de hambre y sed que inició el 26 de junio.
Fariñas explicó en redes sociales que cumplirá con lo acordado por unanimidad la víspera por el Consejo General de su formación política, el Foro Antitotalitario Unido (Fantu), que le exigió “deponer de inmediato” y “so pena de amonestación” la protesta.
Esa misma jornada familiares de Fariñas habían informado a EFE que el opositor, de 61 años, se encontraba en un delicado estado de salud, con fuertes dolores, gran somnolencia y un decaimiento general que le impedía tenerse en pie.
“Me acogeré a lo acordado por el Consejo General del FANTU y a partir de las 9.00 pm de hoy comenzaré a volver a tomar alimentos”, escribió Fariñas, quien destacó que “siempre” ha cumplido con los estatutos de la formación, ilegal en Cuba -como todas salvo el Partido Comunista (PCC)-.
No obstante, el opositor agregó que no se trata de su vida: “debemos tener en cuenta las vidas de varios miles de presos políticos cubanos, que están siendo asesinados”. Indicó además que “si la situación con los presos políticos cubanos se vuelve crítica”, volverá a realizar una huelga de hambre, incluso si eso implica “renunciar al Fantu”.
El Consejo General instó a Fariñas a dejar la protesta tras la resolución no vinculante aprobada este martes en el PE, con los votos de populares, conservadores y liberales. En ella se urge a Cuba a liberar a todos los presos por las protestas del 11 de julio de 2021 y se piden sanciones para el Gobierno cubano por no respetar los derechos humanos.
Una de las reivindicaciones de Fariñas al iniciar la huelga de hambre y sed fue la de exigir a la Unión Europea (UE) la ruptura del Acuerdo de Diálogo y Cooperación, el mecanismo que rige las relaciones bilaterales del bloque con Cuba desde 2017.
Fariñas incluyó también en sus reivindicaciones la liberación en Cuba de forma “incondicional” de “todos los presos políticos” y la retirada de “todos los efectivos militares” rusos y chinos “y sus equipos de espionaje” en la isla.
Asimismo, Fariñas urgió a la Organización de Estados Americanos (OEA) a imponer un “cerco naval y aéreo” a Cuba en aplicación de su Carta Democrática Interamericana, aunque la isla no es parte de ese organismo.
Fariñas, uno de los opositores cubanos más conocidos a nivel internacional, fue detenido en junio en el aeropuerto de Santa Clara, luego de un incidente por el extravío de sus maletas. Se trata de su vigésimo octava huelga de hambre.
El Gobierno de Cuba considera a los disidentes “contrarrevolucionarios” y “mercenarios” al servicio de los intereses de Estados Unidos. Niega además la existencia de presos políticos en sus cárceles.
EFE