Los radares de tránsito están hechos para, entre otras cosas, detectar si un vehículo circula por la vía pública a una velocidad superior a la que se establece por ley y enviar una foto como testigo para que un centro de infracciones le emita la multa correspondiente al conductor.
Por: TN
Eso fue lo que hizo una cámara ubicada en una autopista de Bélgica, más precisamente en la región de Flandes. Por allí pasó un auto a 413 kilómetros por hora, pese a que la velocidad máxima permitida es de 120 kilómetros por hora, cuenta el diario La Dernière Heure.
No hay muchos modelos a la venta en Europa (ni en otras partes del mundo) que tengan la capacidad de alcanzar esa velocidad. Más tarde se supo que se trataba nada menos que de un Bugatti Chiron, cuyo motor permite acelerar hasta los 490 kilómetros por hora.
El caso trascendió ahora, pero ocurrió el año pasado. Desde ese momento se mantiene en secreto el nombre del infractor, aunque se supo que fue detenido por la policía belga y se le aplicó una multa de 4000 euros.
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