La medida fue notificada a las autoridades de la casa de estudios, sin informar si existe o no una investigación por el origen de los fondos.
El régimen de Nicaragua, que preside el sandinista Daniel Ortega, congeló las cuentas bancarias de la jesuita Universidad Centroamericana (UCA), informó este miércoles el medio digital Divergentes, que cita una fuente vinculada al Ministerio de Gobernación.
La UCA, por su lado, a través de un correo electrónico dirigido a colaboradores y estudiantes, titulado “Aviso sobre pagos correspondientes a aranceles o servicios”, explicó que “por inconvenientes en nuestros canales y medios de pagos ajenos a nuestra voluntad, no estamos recibiendo pagos correspondientes a aranceles o servicios de ninguna de las instancias de la universidad”.
“Lamentamos los inconvenientes y les estaremos informando una vez sea posible procesar pagos en nuestra caja central y canales alternos”, agregó la universidad jesuita, fundada en 1961.
Según Divergentes, que cita una fuente vinculada al Ministerio de Gobernación, “el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ordenó el congelamiento de las cuentas bancarias de la UCA y de algunos de sus más altos directivos”, sin precisar los nombres.
Aseguró que esa medida fue notificada este miércoles a las autoridades de la Universidad Centroamericana, sin informar si existe o no una investigación por el origen de los fondos.
En marzo del año pasado, las autoridades nicaragüenses excluyeron a la UCA del 6 % de asignación constitucional que reciben anualmente las universidades.
Jesuitas desterrados
En septiembre de 2022, las autoridades de Nicaragua prohibieron la entrada al país al vicerrector de la Universidad Centroamericana Jorge Huete, después de un viaje de trabajo a Argentina.
El ex rector de la UCA José Alberto Idiáquez, quien participó en un diálogo con el que se buscaba superar la crisis que atraviesa Nicaragua desde abril de 2018, tampoco pudo regresar al país en julio de 2022, después de viajar a México para atender problemas de salud, porque las autoridades no le renovaron su pasaporte.
El actual rector de este centro superior de estudios es el sacerdote Rolando Enrique Alvarado López.
La Universidad jesuita fue escenario de decenas de marchas contra el régimen de Ortega, en el marco de la crisis que atraviesa Nicaragua.
También el 30 de mayo de 2018 abrió sus puertas a miles de estudiantes que buscaron refugio tras participar en una multitudinaria marcha opositora en Managua, denominada “La madre de todas las marchas”, que terminó bañada de sangre, justo después de que Ortega sentenciara en un discurso ante sus seguidores que “Nicaragua nos pertenece a todos y aquí nos quedamos todos”.
Ese día, 15 nicaragüenses perdieron sus vidas y otros 199 resultaron heridos en el más sangriento Día de la Madre en Nicaragua, según cifras del régimen nicaragüense, mientras otros miles se refugiaron en la UCA para escapar de los disparos.
Acogió el museo de la memoria
La universidad jesuita también acogió la exposición “Ama y no Olvida: Museo de la Memoria contra la Impunidad”, impulsada por la Asociación de Madres de Abril (AMA), que busca recordar a los caídos de las manifestaciones antigubernamentales en Nicaragua.
En abril de 2018, miles de nicaragüenses salieron a las calles a protestar por unas controvertidas reformas a la seguridad social, que luego se convirtieron en una exigencia de renuncia de Ortega tras responder con la fuerza.
Las protestas dejaron al menos 355 muertos según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos nicaragüenses elevan la cifra a 684, mientras Ortega reconoce que fueron “más de 300? y mantiene que se trató de un intento de golpe de Estado.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa Murillo como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión.
Con información de EFE