La contraofensiva ucraniana continuó este jueves en las regiones de Zaporiyia (sur) y Donetsk (este), mientras Rusia intensificó sus bombardeos y ataques en el noreste de Ucrania, donde aseguró haber logrado algunos éxitos.
“Las Fuerzas Armadas de Ucrania continúan sus operaciones ofensivas en las zonas de Bajmut (este), Melitópol y Berdiansk (sur)”, informó el Estado Mayor del Ejército ucraniano en su parte diario.
KIEV PROSIGUE SU AVANCE EN EL SUR
De acuerdo con los militares ucranianos, sus fuerzas consolidan las conquistas en el área de Urozhaine (Zaporiyia) y se han atrincherado en el sur de la localidad, considerada clave para el futuro avance hacia la costa del mar de Azov.
El avance de las fuerzas de Kiev también lo confirma en su informe diario el estadounidense Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), que confirma la recuperación de Urozhaine.
Además, el ejército ucraniano avanzó al noreste de la estratégica aldea de Robotyne, también en Zaporiyia, y “probablemente ha logrado amplios avances” en áreas colindantes, señala el ISW.
Kiev lleva ya varias semanas informando de intensos combates en esta zona, algo que confirman también los blogueros militares rusos.
Según la revista Forbes, precisamente en Robotyne Ucrania habría desplegado una de sus unidades “más potentes”, en referencia a la Brigada de Asalto Aéreo 82, equipada con blindados Marder, Stryker y tanques Challenger 2.
Paralelamente, la Guardia Nacional ucraniana anunció oficialmente la vuelta a los frentes de combate del batallón nacionalista Azov, cuyos miembros, considerados terroristas por Rusia, participaron activamente en la defensa del puerto de Mariúpol, tomada por Moscú en mayo de 2022.
MOSCÚ TAMBIÉN CLAMA VICTORIAS
El Ejército ruso aseguró por su parte que había avanzado en los frentes de Donetsk y Járkov, en el noreste de Ucrania.
“En el frente de Donetsk las unidades de la agrupación militar ‘Sur’ (…) rechazaron cuatro ataques del Ejército ucraniano en las cercanías de las localidades de Zaliznyanske, Staromijailivka y Krasnohirivka. Los grupos de asalto llevaron a cabo acciones ofensivas exitosas y mejoraron sus posiciones en la primera línea”, declaró el portavoz de castrense, Ígor Konashénkov.
Además, señaló que en el frente de Kupiansk, en la región oriental de Járkov, “las unidades de la agrupación ‘Oeste’ mejoraron sus posiciones (…) con apoyo de la aviación y la artillería”.
Mientras, representantes impuestos por Rusia en las regiones ucranianas anexionadas desmintieron por su parte que Kiev se haya hecho con el control de Urozhaine, localidad situada en la segunda línea de defensa de Rusia.
SIN F-16 HASTA 2024
La ayuda occidental continúa llegando a Ucrania, pero las autoridades de Kiev admitieron que no esperan recibir este año los anhelados cazas F-16 de fabricación estadounidenses pese a que sus pilotos están “preparados” para recibir instrucción en territorio europeo.
“Está claro que Ucrania no recibirá ni en otoño ni en invierno los F-16 necesarios para nuestra defensa”, afirmó el portavoz de las fuerzas aéreas, Yuriy Ignat, para añadir que no iba a “ocultar a la nación” esa realidad.
“Necesitamos estos cazas, sea a fines del presente año o a principios del siguiente o más tarde. No tenemos otra opción”, añadió el portavoz.
Ignat señaló además que los pilotos ucranianos están preparados para recibir el entrenamiento necesario en su manejo y expresó sus esperanzas de que no haya “demoras” en ese proceso.
Simultáneamente, el gobierno alemán anunció este jueves la entrega de otro paquete de ayuda militar a Ucrania, que incluye dos sistemas de defensa antiaérea IRIS-T, radares de alerta temprana GO12 y más de 4.500 cartuchos de munición de 155 milímetros.
Los anuncios sobre nuevos paquetes de ayuda coinciden con unas declaraciones del expresidente francés Nicolás Sarkozy, quien defendió el estatus neutral de Ucrania y afirmó que una salida para los territorios en disputa entre ambos países es la celebración de referendos reconocidos internacionalmente, a lo que Kiev respondió con la exigencia de “no comerciar” con sus territorios.
EFE