El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Ernesto Abbas, indicó que esperan que para los últimos meses del 2023, el sector pueda tener mayor dinamismo, debido al pago de utilidades a trabajadores de la administración privada, sumado a las bonificaciones que probablemente entregue el régimen de Nicolás Maduro.
Por Corresponsalía lapatila.com
Abbas señaló que en lo que va de año se ha evidenciado una caída en el poder adquisitivo de los venezolanos para comprar bienes y servicios, por lo que los comerciantes han optado por presentar distintos tipos de ofertas con la intención de atraer a los clientes e incrementar el consumo.
De acuerdo a cifras del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), el sector registró una contracción de alrededor de 7% durante el primer semestre de 2023, tras el bajo consumo de los venezolanos, la inflación y la falta de financiamiento bancario.
Por su parte, el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), informó que la tasa de inflación mensual en agosto de 2023 se situó en 13,6 %, cifra que representa el mayor aumento de precios en lo que va del año.
Sumado a esto, el presidente de la Cámara de Comercio de Valencia señaló que las continuas fallas en el servicio de energía eléctrica también están afectando tanto al comerciante como al consumidor. Explicó que cuando los cortes no son programados, el comerciante no puede planificar para atender al público bajo esa circunstancia.
“Cuando llegamos a un establecimiento y no sabíamos que iba a haber un corte, ese consumidor perdió su tiempo, traslado y combustible. Por otro lado, el comerciante no se pudo preparar con una planta eléctrica auxiliar o no generó un mecanismo que le permitiese también atender en ese momento, con esa deficiencia, a ese consumidor”, destacó.
Ante esto, hizo un llamado a Corpoelec a publicar el cronograma de cortes del suministro eléctrico para que los comerciantes puedan ser más eficientes en el desarrollo de la actividad.
IGTF golpea a los consumidores
El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia manifestó preocupación por la aplicación del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) porque encarece el precio final del producto, lo que genera mayores gastos al consumidor.
“Un importador trae un producto, paga el 3 %, este importador se lo entrega al distribuidor es otro 3 %, ya va un 6 %. El distribuidor se lo coloca al detal y en este momento ya tiene 9 %, adicional al 16% de IVA que, lamentablemente, lo paga el consumidor. Y ese 25 % del precio de venta del producto le está restando al consumidor poder adquisitivo”, detalló.
Por otra parte, comentó que están a la espera de la puesta en práctica en los municipios de la Ley de Armonización Tributaria.
“Esperamos que los alcaldes se pongan en sintonía con el sector productivo general de su municipio, buscando el fin último que es mayores ventas, mayores pagos de impuestos, pero por mayor productividad, por mayores consumos y no por mayores alícuotas”, sostuvo.