La crisis humanitaria actual ha golpeado con mayor fuerza a los adultos mayores, quienes pasan muchas calamidades al no poder alimentarse bien ni satisfacer sus necesidades básicas. Muchos pasan hambre o comen mal, ya que la pensión más el llamado “bono de guerra” inventado por el régimen chavista, no alcanza para mucho.
Por: Corresponsalía lapatilla.com
Solo con preguntarle cómo hace para mantenerse actualmente, a María Marcano se le hicieron agua los ojos y contó que tiene un hijo de 33 años con síndrome de Down a quien debe mantener, pero lo que percibe por concepto de pensión y bono de guerra económica es insuficiente para alimentarse bien.
“Mi desayuno hoy fue pan con café y aquí estoy pensando qué vamos a comer para el almuerzo. Yo tengo que vender hielo en mi casa para medio tener un poquito más de ingresos. Una vez al mes cuando cobro la pensión y el bono es que puedo comprar harina de la mejorcita, huevos y mortadela. El beneficio de mi esposo que falleció hace cinco años, me lo quitaron sin razón alguna”, narró con tristeza María.
Agrega que en el tiempo que tiene su esposo de fallecido, solo ha recibido el beneficio de la bolsa de comida en dos oportunidades. Su hijo solo recibe un bono mensual de José Gregorio Hernández, que el último mes fue de apenas 140 bolívares, que varía mensualmente según el precio del dólar BCV.
“Es muy triste estar viviendo esta situación, que uno esté sobreviviendo, comiendo lo que se pueda comprar. Para ir a mi casa en Prado del Sur en Maturín, me toca caminar, porque no tengo pasaje. Esa es la realidad de muchos venezolanos, en especial, las personas de la tercera edad”, lamenta la anciana.
Situación similar atraviesa Esmily Prieto, otra adulta mayor que también vende hielo en su casa para redondearse un ingreso adicional, pues al igual que Marcano, el llamado bono de guerra y los 130 bolívares de pensión que cobra al mes, no le alcanzan para mucho. Cuando puede es que compra medio kilo de carne molida, otro medio kilo de carne entera, un pollo y medio cartón de huevos.
“Si tuviera terreno sembrara yuca, ñame, plátanos, cambures para subsistir y tener algo más de comer. Con lo del bono de guerra y la pensión, además de comida, tengo que pagar la bolsa, la bombona de gas y meterle saldo al teléfono. Uno de mis hijos es que a veces me ayuda con algo. En ocasiones no tengo ni para un pasaje”, cuenta Prieto
Añade que a veces en su casa no tiene para comer y va a donde su mamá que vive con su hermano, y come lo que tengan. Lamenta que a su edad tenga que pasar por estas situaciones penosas. Recalca que son muchos los venezolanos que pasan necesidad.