La ONU espera que la guerra en Ucrania, con las divisiones geopolíticas que ha supuesto, no eclipse las otras urgencias que el mundo vive, como la climática o la del desarrollo sostenible, durante la Semana de Alto Nivel que comienza el lunes en Nueva York.
La vicesecretaria general, Amina Mohamed, reconoció hoy en rueda de prensa que la presencia del presidente ucraniano Volodímir Zelenski en la Asamblea General y el Consejo de Seguridad -el martes y el miércoles, respectivamente- puede poner el foco en la guerra en Ucrania, por encima de esos otros objetivos.
“No es uno u otro (asunto), son todos. Y es difícil porque son muchos temas muy difíciles los que llegan a la ONU. No siempre podemos resolverlos todos, pero esperamos cerrar esa brecha”, dijo Mohamed, que tomó la palabra en ausencia del secretario general, António Guterres, quien se encuentra en La Habana para la cumbre G77+China.
Solamente un 15 %
La intervención de la vicesecretaria estuvo enfocada en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que en su ecuador -fueron formulados en 2015 para cumplirse en 2030- solo se han cumplido en un 15 %, debido principalmente al parón que supuso la pandemia de la covid-19.
No es casual que este año la apertura de la 78 Asamblea General el próximo martes venga precedida el lunes por otra cumbre sobre los ODS a la que han sido invitados más de 5.000 actores, entre gobiernos estatales o locales, empresas, sociedad civil o mundo académico.
Amina Mohamed resaltó que en un momento de gran tensión geopolítica, estos objetivos “son el único marco que nadie discute”, por haber sido consensuados entre todos los países.
Sin embargo, más adelante tuvo que reconocer que hay cuestiones como la igualdad de género y los derechos sexuales y reproductivos (el objetivo número 5) que están suponiendo “problemas de lenguaje”, eufemismo con el que la ONU suele aludir a las discrepancias a la hora de poner sobre el papel la declaración final de la cumbre de los ODS.
Fuentes diplomáticas han explicado que un grupo de países del tercer mundo, capitaneados por Pakistán, son los que con más ahínco están objetando esa insistencia en la igualdad de género y tratando de rebajar el tono del comunicado final.
Pero Mohamed insistió en que ese problema, aun siendo serio, no debe desviar la atención de otro más grave: “la tremenda injusticia en lo referente a la distribución de la riqueza”.
Reconocer a los que mejor lo hacen
Achim Steiner, el director del Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD), al lado de Mohamed, insistió por su parte en que el mundo no debe ver los ODS como de interés para los países pobres pues “son universales”, y alertó contra la tentación de considerarlos irrelevantes.
Steiner reconoció el retraso de los ODS pero no quiso caer en el pesimismo, enfatizando que hay hechos en el mundo que innegablemente muestran el avance universal, como la conectividad a internet, que ha pasado de mil millones de usuarios en 2005 a 5.300 millones actualmente.
El Consejero Especial para la Acción Climática, Selwin Hart, insistió por su parte en que, también por culpa de la covid y de la crisis económica mundial, los objetivos de descarbonización están muy lejos y por ende se ha avanzado muy poco en el principal punto de los Acuerdos de París de 2015: limitar el calentamiento mundial a menos de 1,5 grados en comparación con los niveles preindustriales.
Hart recalcó que los países industrializados del G20 son responsables de un 80 % de las emisiones de carbono, y eso impide “traer la justicia climática a los países en desarrollo que están en primera línea”, entre los que citó a los países africanos y los insulares.
Por esta razón la ONU ha programado para el jueves 20 otra cumbre paralela sobre estas cuestiones, denominada Cumbre de Ambición Climática, en la que ha anunciado que reconocerá a los “mejores alumnos”, un título abierto no solo a países sino también a sociedad civil o mundo empresarial.
EFE