Desde “La Puerta del Sur” de Venezuela hasta los rascacielos de Miami, la historia de Abelardo Achkar es un ejemplo viviente de que “El éxito no conoce fronteras”. Su primera obra literaria resume las inspiradoras experiencias que lo acompañan como migrante lejos de sus raíces. Cada página es el fiel reflejo del arduo proceso que enfrentó, de qué forma lo superó y revela las herramientas de crecimiento personal para lograr un estatus migratorio legal y positivo.
La publicación de su libro tan solo es un prólogo de la admirable labor de este visionario abogado. Hoy en día también es el director ejecutivo de “Hello Inmigrante”, un emprendimiento que ofrece diferentes servicios para los extranjeros, especialmente latinos, en EEUU. En un mundo de constante cambio y sorprendentes lecciones, el criollo conversó con La Patilla sobre todos los detalles de este innovador proyecto.
Por: Elizabeth Gutiérrez | lapatilla.com
Abelardo Antonio Achkar Sanz es oriundo de Ciudad Bolívar y vivió su juventud en Maracaibo. Se preparó profesionalmente, desarrolló una carrera política y se graduó como abogado, pero contó que ejerció poco tiempo debido a que en el momento menos esperado se vio forzado a emigrar. “Por temas políticos tuve que salir de mi país y pedir asilo en Estados Unidos”.
Resiliencia, es la mejor forma de describir el inicio de su trayectoria lejos de su tierra natal. Después de tomar sus maletas, dejarlo todo y empezar de nuevo, se enfrentó solo a un escenario incierto: “Fue la parte más ruda de toda mi migración”, aseguró. El criollo no tuvo otra opción que continuar y aferrarse a la esperanza de reencontrarse con los suyos. “Luego que me adapté y que mi familia, tanto padres, hermana, como mi esposa, fueron llegando al país, se me hizo más fácil y pude avanzar un poco más rápido (…) sin duda alguna el proceso de adaptación es el más difícil en este país”, agregó.
Entre las páginas del éxito
La historia de Abelardo es un testimonio vivo de superación y dedicación, y por esta razón quiso plasmar sus vivencias y compromisos en un libro para aquellos inmigrantes que buscan un mejor futuro en el extranjero. “El éxito no conoce fronteras” es un libro que busca ayudar a miles quienes se embarcan en una dura travesía, y que en ocasiones, se sienten perdidos en un nuevo país”.
“Sienten que no se han adaptado, que no conocen el sistema y que nunca lo van a entender”, dijo. Pero este empresario enfatizó que solo se trata de barreras mentales que se pueden superar, y que Estados Unidos ofrece oportunidades para todos, independientemente de su origen. Su mensaje es claro: si trabajas por tus sueños, puedes alcanzarlos, sin importar las fronteras que encuentres en tu camino.
Y uno de los puentes hacia el éxito de Abelardo, fue poder forjar “Hello Inmigrante”.
En 2019, fundó una empresa dedicada a la preparación de trámites migratorios que rápidamente se convirtió en un modelo de éxito. Esta experiencia lo llevó a crear “Hello Inmigrante”, un emprendimiento que abarca distintos tipos de gestiones para inmigrantes o ciudadanos estadounidenses. “Queríamos un espacio donde los inmigrantes pudieran acudir para hacer sus trámites tanto migratorios como contables y de seguros, que son tan importantes en este país”, relató Achkar.
Además, Abelardo planea la expansión de la empresa a través de franquicias, lo que brindará a cientos de emprendedores la oportunidad de crecer y tener éxito en Estados Unidos. Sin embargo, la capacitación es clave, y Achkar está dispuesto a proporcionar todo el conocimiento necesario para garantizar que quienes adquieran una franquicia de “Hello Inmigrante” estén preparados para triunfar.
Un apoyo invaluable
Pero, la pregunta es: ¿cómo ayuda “Hello Inmigrante” a simplificar los trámites migratorios y otros asuntos legales para los exiliados en Miami? Abelardo destacó la importancia de su equipo altamente capacitado, que comprende las necesidades de los inmigrantes recién llegados y aquellos que ya llevan tiempo en el país. Aunque no pueden brindar asesoría legal ni representación en cortes de inmigración, su enfoque está en la preparación de trámites migratorios.
“Hay personas que solamente ameritan consignar o aplicar a un trámite, llenar ciertos formularios de inmigración para solicitar cierto beneficio, por ejemplo: asilo político, Estatus de Protección Temporal (TPS), permiso de trabajo, parole humanitario. Todos estos son formularios que la persona puede llenar por su cuenta, pero que quizás no entienden el idioma o no entienden estos formularios de inmigración. Por ello, acuden a empresas como la nuestra donde pagan un costo muy bajo por el servicio, se les llena el formulario y se le consigna ante inmigración”, detalló.
Para muchos inmigrantes, llenar formularios de inmigración puede ser abrumador debido a la complejidad de la burocracia. “Hello Inmigrante” se convierte en un recurso invaluable que facilita aspectos cotidianos. Esto no solo ahorra tiempo y esfuerzo, sino que también reduce significativamente los costos en comparación con los honorarios de las firmas de abogados.
El líder valiente y audaz se esfuerza en mediar desde su propia experiencia entre los aspectos legales y financieros que afectan a los recién llegados a un país extranjero. Es importante prestar atención a ciertos criterios que podrían facilitar el proceso. Y es justo cuando instó a los migrantes a permanecer alerta con respecto a los trámites legales, puesto que en Estados Unidos muchas de las peticiones o de los beneficios que están disponibles tienen un tiempo de caducidad después del ingreso al país.
“Si entraste al país y lo que deseas es optar por el beneficio de asilo político, tienen máximo un año para aplicar a él. Si deseas solicitar TPS, debes cumplir con los criterios de elegibilidad e inscribirte en el Estatus de Protección Temporal en el tiempo que lo indique Inmigración. Entonces, lo que le puedo decir a las personas o invitar es a que busquen información y no dejen para mañana lo que pueden hacer hoy”.
Sobre el factor económico, hizo hincapié en la dura travesía que implica iniciar de cero en tierra norteamericana y en la importancia de ahorrar durante los primeros años. “Una vez que la persona esté adaptada, tenga un buen trabajo, debe buscar la forma de emprender. Acá hay muchos servicios que pueden hacer para solucionar problemas de los estadounidenses que son bastante remunerados. Entonces, los motivaría a tratar de ahorrar lo suficiente para luego incursionar en un emprendimiento que solucione algún problema a la población americana”.
El poder del conocimiento
Abelardo logró fusionar su experiencia personal con su visión emprendedora para ofrecer un faro de esperanza y éxito a los inmigrantes. De esta manera comienza a hacerse un nombre y una marca que brillan con luz propia.
Su historia es un testimonio de cómo la experiencia personal puede convertirse en una fuente inagotable de inspiración y progreso. La idea de que una empresa atendiera las necesidades de los inmigrantes y pudiera llegar a la población estadounidense, se materializó a través de este emprendimiento innovador.
“Gracias al conocimiento que adquirimos previamente, supimos cómo englobar una empresa que tenga todos los servicios que además de atender a los inmigrantes, puedan llegarle a la población americana”, explicó.
Paralelamente, el libro “El éxito no conoce fronteras” transmite un mensaje estimulante que se respalda con sus vivencias y con los testimonios de los inmigrantes que ha podido asistir a lo largo de los años, lo que hace de este una guía para aquellos que buscan trascender cualquier obstáculo y alcanzar las metas.
Al tratar la situación actual de la inmigración en Estados Unidos, Abelardo fue sincero en su evaluación. Para él, aunque existen leyes “amigables” para los inmigrantes, mencionó que el sistema migratorio estadounidense aún necesita mayor precisión. El venezolano destacó los desafíos únicos que enfrentan los inmigrantes que buscan la residencia permanente, que comparado con otros países es menos accesible.
“Vemos como Canadá o países de Latinoamérica pueden otorgar una residencia permanente a un inmigrante que tenga una cantidad de tiempo considerado en su país. Acá el camino hacia la residencia es muy difícil, pero es más difícil estar ilegal en este país también. Entonces, invito a los inmigrantes a que opten por cualquier trámite que esté disponible para ellos, así no sea una residencia permanente, tienen que tomarlo para poder tener permiso de trabajo y legalidad en Estados Unidos”, precisó.
Crecer con perseverancia y gratitud
Su pasión por brindar apoyo a los inmigrantes en su proceso de adaptación, se debe a todo lo que soportó al arribar a tierras desconocidas. Fue entonces cuando el consejo de amigos y familiares lo impulsó a despegar.
“Pregúntenle a sus amigos cómo ha sido su proceso, pregúntenle a sus familiares, pregúntenle a sus compañeros de trabajo y allí encontrarán muchos testimonios que quizás los puedan ayudar en ese valioso proceso de adaptación en el país”.
Abelardo compartió que la perseverancia es la base de cualquier emprendimiento. Tras convertirse en el propietario de seis empresas, dejó claro que cada una avanza de manera diferente, pero aún así, no deja de trabajar arduamente por el desarrollo eficaz y progresivo. “Es importante no darse por vencido y seguir mejorando en cualquier punto hasta lograr que tu emprendimiento tenga éxito”. También insistió en que conocer cómo se maneja el sistema en Estados Unidos abrirá muchas puertas.
Comprometido con la comunidad de inmigrantes hispanos, espera dejar un gran legado basado en una actitud entusiasta, la gratitud y el esfuerzo desmedido por apoyar a los más necesitados.
“Es el hacer las cosas bien, agradecer al país que te cobijó, que te dejó comenzar una nueva vida a través de tus acciones. Una acción habla o dice más que mil palabras. Por lo tanto, que esa acción sea positiva para que te conviertas en un inmigrante de los que vale la pena tener en su casa, un inmigrante emprendedor y visionario. Un inmigrante que pueda ayudar a más personas a resolver problemas que quizás las otras personas no están en capacidades de resolverlas”.
Y finalmente, recomendó a los inmigrantes que permanecen en una lucha constante para hallar estabilidad en el exterior que “nunca desistan ni bajen los brazos, persistan en sus sueños y trabajen todos los días de su vida hasta lograrlos, y entiendan que el éxito no lo determina un tercero”.