El 7 de octubre, el movimiento islamista palestino Hamás lanzó un ataque contra Israel que dejó graves consecuencias.
Más de 1,400 personas, la mayoría civiles, perdieron la vida en el territorio israelí a manos de los comandos de Hamás, según confirmaron las autoridades.
Hamás también secuestró a cerca de 240 personas durante la ofensiva, incluyendo muchos israelíes y extranjeros con doble nacionalidad.
Desde entonces, solo cuatro mujeres y una militar han podido ser liberadas.
El brazo armado de Hamás estima que alrededor de 50 rehenes retenidos en Gaza fallecieron debido a los bombardeos israelíes en represalia.
Entre los más de 200 ciudadanos extranjeros que perdieron la vida, según un recuento de la agencia AFP, se encuentran 39 franceses, 32 tailandeses y 31 estadounidenses.
Joe Biden informó que ciudadanos de Estados Unidos se encuentran entre los rehenes en manos de Hamás.
Un total de 21 ucranianos y 19 ruso-israelíes también fallecieron.
Otros países que registraron víctimas mortales son Reino Unido, Nepal, Alemania, Argentina, Canadá, Rumania, Portugal, China, Filipinas, Austria, Brasil e Italia.
Asimismo, se reportaron rehenes y desaparecidos de nacionalidad mexicana, húngara, neerlandesa, uruguaya, paraguaya y tanzana.
El ataque contra Israel deja un alto precio en vidas humanas y una grave crisis humanitaria.
Con información de AFP