Cuando el novio de Maira Khan la dejó el año pasado, estaba desesperada porque regresara.
Por: NY Times
“Sabía que estaba viendo a alguien más, pero no sabía qué tan seria era la relación”, recordó Khan, influencer de Toronto. “
“Solo quería que ella se fuera”.
Sin saber qué más hacer, decidió recurrir al ocultismo.
“El primer hechizo que compré fue un hechizo para cortar el lazo, que para mí tenía que ver con eliminar a la tercera persona”, comentó Khan, de 28 años.
Encontró una bruja en TikTok que solo necesitaba el nombre de la ex pareja para realizar un ritual con velas:
Atar un trozo de cuerda alrededor de dos velas y dejar que las mechas se consuman hasta que las llamas rompan el cordel.
“Dijo que todo había salido bien”, reveló Khan.
Es una buena época para ser bruja.
Quienes se han adentrado en el “oficio” son parte de una industria de 2300 millones de dólares en el universo más extenso de los servicios psíquicos, un campo que incluye la lectura de la palma de la mano (la quiromancia), las cartas del tarot (la cartomancia) y la astrología.
La gente ya no llama a los videntes de la guía telefónica ni golpea las puertas de las tiendas de brujería para pedir fortuna:
los emprendedores sobrenaturales están instalados en TikTok y Etsy.
Hay casi 36.000 vendedores en Etsy que ofrecen “lecturas psíquicas” y parafernalia relacionada, como velas encantadas, kits de botica, aceites rituales y muñecos de vudú.
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