El sol, astro rey, la razón de la existencia de nuestro sistema solar y, desde luego, de la vida toda, ya no volverá a brillar sobre la ciudad más al norte de los Estados Unidos en lo que resta del año. Se trata de Utqiagvik, en Alaska, en donde se puso el sol por última vez en 2023, sumiendo a sus residentes en la oscuridad hasta el próximo 23 de enero de 2024.
Por Clarín
La “noche polar” ya tiene acostumbrados a los 4.000 habitantes de este poblado, ya es es un fenómeno que se repite todos los años. La explicación es sabida, se debe a la forma en que la Tierra se inclina sobre su eje, dejando partes del Artico y la Antártida de espaldas al sol durante meses.
Así entonces, para cuando las personas que viven allí vuelvan a ver la luz del sol, mucho habrá cambiado en el mundo.
El área seguirá viendo algún tipo de amanecer pero el sol permanecerá por debajo del horizonte. En el solsticio de invierno del 21 de diciembre estará 4,7 grados por debajo del horizonte al mediodía antes de comenzar su reaparición gradual de un mes.
El lado positivo para los residentes es que ocurre lo contrario durante el verano y Utqiagvik verá la luz del día sin fin desde el 11 de mayo hasta el 18 de agosto, lo que le dio el sobrenombre de ‘la tierra del sol de medianoche’.
En el camino hacia la oscuridad, los días se acortaron dramáticamente, hasta tener un puñado de horas de luz diurna.
El largo y oscuro invierno no es de mucha ayuda por el duro clima con temperaturas que apenas llegan a cero la mayoría de los días.
Si bien el foco se centra en Utqiagvik, vale hacer mención que no es el único pueblo que se queda a oscuras, ya que lo mismo sucede en Murmansk, la ciudad más grande del Círculo Polar Ártico.
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