Los médicos forenses del Ministerio Público que recientemente examinaron el cadáver de Tirone González, rapero venezolano mundialmente conocido como Canserbero, constataron este viernes al menos tres discrepancias que contradicen la tesis del presunto suicidio.
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Al respecto, el fiscal chavista, Tarek William Saab, publicó en redes sociales los “hallazgos del equipo del Ministerio Público en el protocolo de autopsia médico forense en el marco de exhumación judicial”.
En primer lugar, “las lesiones que presentó TIRONE GONZÁLEZ en su humanidad fueron causadas estando vivo (pre mortem). Pese a que el mismo se encontraba en estado de reducción esquelética: se observó en la exhumación que dichas fracturas fueron graves y las mismas tenían reacción vital“.
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El segundo dato clave fue que “Canserbero presentó, según registros fotográficos de la inspección del cadaver tomadas en el 2015, lesiones que impresionan fueron causadas con un objeto cortante con bordes bien definidos: estas lesiones, según la inspección refiere, fueron ocasionadas en el lado izquierdo del cuerpo. No obstante, las mismas tampoco fueron plasmadas en la autopsia de la época”, es decir, en enero de 2015, cuando ocurrió la lamentable muerte del cantante, “observándose claras diferencias entre las lesiones prescritas en el protocolo de autopsia y las lesiones descritas en la inspección del cadaver de TIRONE GONZÁLEZ”.
De igual manera, Saab indicó que “nos encontramos investigando la génesis de las lesiones cortantes presentadas en el lado izquierdo del tórax de Canserbero, ya que se corroboró el día de ayer que el impacto del cuerpo (punto de choque) fue en su lado derecho y no en el izquierdo, lo cual se compagina con la recreación con un modelo similar en estatura y peso a Tirone, realizada por el Ministerio Público el 15 de noviembre de 2023″.
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Por último, el fiscal chavista ordenó un “estudio comparativo una vez tengamos los resultados de la exhumación previstos para mediados de la próxima semana”.
Natalia Améstica estaba casada con el cantante Carlos Molnar y era mánager de Canserbero. Los dos últimos murieron en extrañas circunstancias en enero de 2015. Un día después de la trágica noticia, Guillermo Améstica, hermano de Natalia, declaró ante los medios de comunicación que “Canserbero estaba alucinando” y lo culpó del presunto asesinato de Carlos, su colega y amigo.
Ocho años después, el Ministerio Público reabrió el caso ante la presión de los familiares de los fallecidos y la opinión pública.
