Una nueva liberación de rehenes secuestrados por Hamás a cambio de presos palestinos está prevista este domingo, en el tercer día de una tregua temporal entre Israel y el movimiento islamista palestino que permite suministrar más ayuda humanitaria a los habitantes de la Franja de Gaza.
Las liberaciones del sábado se retrasaron varias horas después de que Hamás acusara a Israel de no respetar los términos del acuerdo alcanzado el miércoles gracias a la mediación de Catar, Estados Unidos y Egipto, una señal que muestra la fragilidad de la tregua.
Mientras, centenares de camiones con ayuda humanitaria siguen entrando en la Franja de Gaza, asediada durante siete semanas de guerra desencadenada por el sangriento ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre.
En total, el movimiento islamista entregó el viernes y el sábado 41 rehenes israelíes y extranjeros al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), e Israel liberó a 78 presos palestinos.
El acuerdo prevé cuatro días de tregua que deberían permitir la liberación de 50 rehenes y 150 prisioneros palestinos.
El gobierno israelí dijo disponer de la lista de secuestrados que serán liberados el domingo, pero no desveló sus identidades, el número ni la hora.
– “Guerra psicológica” –
El portavoz del ejército israelí Doron Spielman declaró que Hamás emplea una “táctica dilatoria” en una “guerra psicológica”, después de la liberación retrasada el sábado de 17 rehenes.
En un video publicado por las brigadas Ezzedine al-Qassam, el brazo armado del movimiento islamista, se muestran 13 rehenes israelíes y cuatro tailandeses abordando vehículos del CICR poco antes de la medianoche. Todos llegaron poco después a Israel por Egipto.
Entre los rehenes liberados está Maya Regev, de 21 años, secuestrada junto a su hermano, de 18, cuando trataba de huir del festival de música Tribe of Nova, en el que Hamás mató a 364 personas en su ataque la madrugada del 7 de octubre.
“Estoy muy feliz de que Maya esté a punto de unirse a nosotros. Sin embargo, estoy desconsolada porque mi hijo Itay sigue siendo prisionero de Hamás en Gaza”, dijo su madre Mirit, citada por el Foro de Familias de Rehenes.
En Tel Aviv, decenas de miles de manifestantes se congregaron el sábado en la tarde para pedir la liberación total de los retenidos.
El 7 de octubre, los milicianos de Hamás mataron a 1.200 personas y secuestraron a alrededor de 240, según las autoridades, en el peor ataque en suelo israelí en la historia del país.
En respuesta, Israel ha bombardeado sin respiro el exiguo territorio. El grupo islamista, que gobierna Gaza desde 2007, afirma que 14.854 personas han muerto hasta ahora por la ofensiva israelí, entre ellos 6.150 niños.
– “Palestina está herida” –
Entrada la noche del sábado, Israel anunció la liberación de un segundo grupo de 39 prisioneros palestinos, todos mujeres y menores de 19 años.
En Cisjordania ocupada, convoyes de vehículos con banderas de movimientos palestinos liderados por Hamás desfilaron por las calles mientras escoltaban un autobús del CICR que transportaba a los prisioneros liberados.
En Jerusalén Este, ocupada y anexionada por Israel, las celebraciones fueron más discretas. Miembros de las fuerzas de seguridad israelíes, armados y con casco, rodeaban en gran número la vivienda de Israa Jaabis, de 39 años, la prisionera más conocida de la lista.
Jaabis fue condenada a 11 años de prisión por detonar un recipiente con gas que llevaba en el maletero de su vehículo durante un control de tránsito en 2015, hiriendo a un agente de policía.
Su fotografía con los dedos atrofiados y el rostro parcialmente quemado en un tribunal israelí se suele utilizar para mostrar el sufrimiento de los prisioneros palestinos.
“Me avergüenza hablar de alegría cuando toda Palestina está herida”, dijo Jaabis a los periodistas junto a su hijo Moatassem, de 13 años. “Deben liberarlos a todos”, pidió.
El jefe del Estado Mayor del ejército israelí, el general Herzi Halevi, advirtió que la guerra no ha terminado. “Empezaremos a atacar de nuevo Gaza en cuanto la tregua termine”, prometió.
El brazo armado de Hamás confirmó la muerte del mando de su brigada del norte de Gaza, Ahmed al-Ghandour, y de otros tres altos cargos, entre ellos Ayman Siyyam, presentado como el jefe de las unidades de disparo de cohetes, en la ofensiva israelí.
– Ayuda humanitaria –
El acuerdo también incluye la entrada de ayuda humanitaria y de carburante en Gaza, asediada por Israel desde el 9 de octubre.
Un total de 248 camiones cargados con ayuda humanitaria entraron el sábado en la Franja de Gaza, 61 de los cuales llevaban agua, alimentos y material médico al norte del territorio, según la ONU.
El ejército considera que el tercio norte de la Franja de Gaza, donde se encuentra la ciudad de Gaza, es una zona de combate que alberga el centro de infraestructuras de Hamás. Ordenó a la población abandonar esa zona y le impide volver.
Pese a la advertencia, miles de desplazados en Gaza aprovecharon la pausa en los combates para tratar de regresar a sus hogares en el norte.
“No tenemos armas. Somos civiles”, afirmó Mahmud Masood entre los escombros de Jabaliya, en el norte del territorio. “¿Por qué han destruido nuestras casas?”
Según la ONU, la mitad de las viviendas del Gaza fueron dañadas o destruidas y 1,7 millones de personas –de 2,4 millones de habitantes– fueron desplazadas.
En Cisjordania ocupada, ocho palestinos murieron en 24 horas en varios incidentes con el ejército israelí, según el ministerio palestino de Salud.
AFP