Nicolás Maduro dejó la vergüenza en el mismo lugar donde perdió los zapatos y protagonizó este domingo en redes sociales una cuestionada interpretación de la emblemática canción de Simón Díaz, “Compadre Pancho”.
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En la grabación, que se viralizó rápidamente, Maduro estaba sentado con las piernas cruzadas y en medias, mientras sostenía un micrófono y cantaba con evidentes fallas de entonación.
Mientras tanto, su esposa Cilia Flores, conocida en el palacio de Miraflores como “Cilita”, rasgaba un par de acordes en un cuatro mientras sonreía.
“Ayer fuimos de visita sabatina a casa de unas amistades y cantamos de lo lindo. ¿Qué les parece? ¡Nace una estrella!”, expresó Maduro en su cuenta de X.
Pese a que todavía le falta mucho que pulir a este dúo, con seguridad la música se le da mejor que gobernar.