Un avión de la Marina estadounidense ha permanecido atorado en la bahía de Kaneohe en Hawái luego de salirse la pista de la base militar a 16 kilómetros de Honolulu el pasado 20 de noviembre. Un nuevo video publicado esta semana revela que las llantas de la aeronave han quedado atascadas en un importante arrecife de coral.
Por El País
Las autoridades aún investigan los motivos por el que el avión no alcanzó a frenar dentro de la zona de aterrizaje, provocando que terminara en el agua con nueve personas a bordo. Todos los pasajeros fueron rescatados sin lesiones.
Un equipo de la Marina logró extraer todo el combustible de la nave, aproximadamente 7.500 litros, para reducir el impacto ecológico del choque. El comandante a cargo de la misión de extracción del avión, Mark Anderson, detalló que el motor izquierdo está atascado en el coral, pero que la marea ayuda a que el peso de la aeronave se aligere por momentos cuando flota en el agua.
La bahía de Kaneohe es conocida por ser un espacio importante de conservación marítima, con arrecifes de coral, un antiguo estanque de peces nativos y un caldo de cultivo para tiburones martillo. Oficiales ambientales esperan poder hacer un examen más detallado de los daños provocados por el incidente una vez que se retire el avión.