Los bulevares Gómez y Guevara, otrora pujantes pasillos comerciales de la ciudad de Porlamar, hoy lucen desolados, pues más del 80 % de las tiendas se encuentran cerradas definitivamente.
Por Dexcy Guédez//Corresponsalía lapatilla.com
Literalmente están convertidos en cementerios y las pocas tiendas que quedan abiertas han cambiado de ramo.
Las que antes marcaron pauta en la isla de Margarita por los precios y la calidad de la mercancía seca importada, hoy venden comida, víveres y aires acondicionados u otros electrodomésticos.
En otros tiempos para esta época del año, la gente caminaba con dificultad por dichos bulevares en busca de los estrenos para Navidad y Año nuevo.
“Ya eso no existe. La poca ropa que hay en existencia es vieja que no sale ni bajándole el precio. Desde 2014 no hemos podido importar ropa ni calzados. Los pocos zapatos que tenemos se despegan cuando le meten el pie”, describió Marinely Marcano, encargada de una tienda en el bulevar Gómez, en la ciudad marinera.
Los vendedores informales han tomado partido en esos bulevares, ante el masivo cierre de tiendas, pero tampoco han visto despegar las ventas navideñas a estas alturas.
Felipe Rodríguez, vendedor de mercancía seca en uno de los ventorrillos del bulevar Gómez, lamentó que ni siquiera por que el pasado viernes, los empleados públicos recibieron la tercera porción de los aguinaldos, repuntaron las ventas en esas zonas comerciales.
Los encargados de tiendas en los principales centros comerciales de la isla, coinciden en que las ventas navideñas no terminan de arrancar, aunque confían en que los empleados del sector privado cobren sus utilidades para sentir cierto movimiento comercial propio de esta época.