“Hoy tenemos unas universidades que tienen cerrados sus centros de investigación, que no tienen presupuesto para comedor, transporte, fotocopias, para los laboratorios. Además, tenemos un salario destruido porque el Estado venezolano se ha encargado de hacerlo”, denunció Raúl Brito, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Nacional Experimental de Guayana (Apuneg).
Pableysa Ostos / Corresponsalía lapatilla.com
No es la primera vez que los profesores y personal administrativo que labora en las universidades públicas de Ciudad Guayana alzan su voz para denunciar la precariedad en las que están esas casas de estudios.
“Ahora me pregunto, ¿y qué tenemos? Algunos profesores, unos administrativos, unos obreros muriéndose de hambre. Nos están fraccionando nuestro bono vacacional a los trabajadores de empresas básicas y a los trabajadores del sector público”, denunció Brito.
El presidente de Apuneg aprovecho para recordar que en un año tuvieron dos ministras. “La ministra Tibisay Lucena, que falleció lamentablemente, y la ministra Sandra Oblitas, que estuvo seis meses en silencio y salió hablando de que fuéramos a votar por el referéndum, pero no habló nunca acerca de dónde están las condiciones laborales y las providencias estudiantiles”.
El panorama de los profesores universitarios no es distinto al de los docentes del país, ya que según lo relatado por Brito, muchos de sus compañeros tienen 3 y 4 trabajos, “vendiendo tortas, reparando cosas para poder sobrevivir”.
“Tenemos 645 días sin aumento salarial, esto no es fácil por toda la situación por la cual este Gobierno ha hecho pasar a toda la masa trabajadora, pero nosotros decimos que aquí estamos en pie y seguiremos a pesar de que hasta el momento no hemos obtenido una respuesta satisfactoria”, sentenció Brito.