El FBI reveló que se han producido cientos de falsas amenazas de bomba enviadas por correo electrónico a instalaciones judías en todo Estados Unidos durante el fin de semana, y que estas están conectadas entre sí fuera del país.
Por El Diario NY
“En este momento, basándose en un lenguaje similar y en el uso de correos electrónicos específicos, parece que los perpetradores de estas amenazas están conectados. Además, estas amenazas parecen provenir de fuera de Estados Unidos”, dijo el FBI en un mensaje a organizaciones judías nacionales que fue obtenido por CNN, aclarando que las amenazas no involucraban un riesgo real.
“Hasta la fecha, ninguna de estas amenazas por correo electrónico ha involucrado ningún dispositivo explosivo real o riesgo creíble de daño a los feligreses”, agregó la oficina.
La Liga Antidifamación (ADL), una organización judía internacional sin fines de lucro, señaló que más de 400 instalaciones judías recibieron falsas amenazas de bomba por correo electrónico desde el sábado, agregando que los mensajes tenían como objetivo sembrar miedo y odio en la comunidad judía en Estados Unidos.
Por su parte, Oren Segal, vicepresidente del Centro sobre Extremismo de ADL, dijo al medio anteriormente citado que la organización creía que una persona o un pequeño número de personas estaban detrás de las amenazas.
¿En qué consisten las amenazas?
Estos mensajes enviados por correo electrónico contenían similitudes, incluida la naturaleza de las supuestas amenazas y variaciones en el nombre de un grupo que afirmaba ser responsable de ellas, agregó Segal.
Según el vicepresidente, el lunes se produjo una avalancha de amenazas de bomba destinadas a infligir miedo como “una técnica antigua que utiliza tecnología moderna”, agregando que las amenazas enviadas en línea son “más baratas y más fáciles de enmascarar que en cualquier otro momento de la historia de la humanidad”.
Entretanto, la organización Secure Community Network (SCN), también había informado anteriormente de más de 200 amenazas de bomba y “llamadas de aplastamiento”, que consisten en bromas para llevar a las autoridades a un lugar donde realmente no ocurrió ningún delito, contra instituciones judías.
Las falsas amenazas e incidentes han tenido como objetivo instalaciones en California, Arizona, Connecticut, Colorado, Washington, además de otros estados, indicó la cadena.
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