La expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez (2018-2020) informó este viernes que se graduó como técnica media en Textil y Confección desde una prisión donde se encuentra recluida desde marzo de 2021 por la crisis política y social de 2019.
La familia de Áñez, que maneja sus redes sociales, publicó el certificado emitido por el Ministerio de Educación del título de técnica media en Textil y Confección que realizó en el Centro de Educación Alternativa.
“Titulada como técnica media cumplo 1.013 días de detención ilegal ‘preventiva’ confeccionando productos textiles y escribiendo #DePuñoYLetra con esperanza, Justicia y Libertad”, escribió Áñez.
Agregó que resiste y lucha “con fe” y que “la democracia volverá” en unidad.
El documento señala que queda habilitada para el “ejercicio profesional y continuidad de estudios superiores en todo el territorio del Estado Plurinacional”.
En febrero de este año, Áñez también mostró otro certificado de ‘técnico auxiliar’ en Confección Textil.
En 2021, Áñez tejió una bandera boliviana con la palabra “justicia” que su hija Carolina Ribera lleva consigo a distintos eventos en los que pide que liberen a su madre y señala que le corresponde un juicio de responsabilidades y no someterse a la Justicia ordinaria.
En junio de este año, la expresidenta transitoria publicó el libro ‘Jeanine, De puño y Letra’, que es un compendio de más de un centenar de manuscritos en los que habla de su vida política, su detención y sus “vivencias como presa política”.
Las acusaciones
Áñez es abogada y comunicadora social y la Justicia la procesa por el caso denominado “golpe de Estado I”, bajo acusaciones de terrorismo y conspiración dentro de las investigaciones por la crisis de 2019.
El año pasado fue sentenciada a 10 años de cárcel por otro proceso en el que se le acusa de situarse ilegalmente en la línea de sucesión en 2019.
Áñez reclamó en reiteradas ocasiones que le corresponde un juicio de responsabilidades por su calidad de exmandataria interina del país y en mayo de este año denunció al Estado boliviano ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por negarle el juicio de responsabilidades.
La expresidenta transitoria afronta al menos siete procesos en la Justicia ordinaria, entre ellos los casos conocidos como ‘Sacaba’ y ‘Senkata’, ambos por las muertes de civiles durante la crisis.
El Gobierno de Luis Arce y el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) afirman que en 2019 hubo un “golpe de Estado” contra el expresidente Evo Morales (2006-2019), mientras que la oposición sostiene que las protestas que derivaron en su renuncia a la Presidencia fueron consecuencia de un fraude a su favor en los fallidos comicios generales de ese año, que luego fueron anulados.
EFE