La muerte del rapero Tyrone González, Canserbero, tiene una arista en Chile. Los hermanos María Natalia y Guillermo Améstica, ha dicho el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, son de origen chileno. Son quienes han asumido su responsabilidad en los homicidios del cantante venezolano y del bajista Carlos Molnar el 19 de enero de 2015, en Venezuela. Esto, mientras que por ocho años las investigaciones apuntaron a la hipótesis de que el cantante, tras una pelea y en medio de un ataque psicótico, habría asesinado a su amigo y luego se había lanzado desde un décimo piso en una residencia de la ciudad de Maracay, en el estado de Aragua.
Por: El País
En vídeos difundidos por William Saab, en la red social X –y expuestos en una conferencia de prensa en Caracas– se muestra a ambos explicar el papel que habrían tenido en el doble homicidio. La mujer alude a un desencuentro por el impago de unos pasajes aéreos y de dinero por su pareja, Molnar, como parte de la organización de la gira de Canserbero por Argentina y Chile a finales de 2014. Al testimonio ha sumado que el rapero también le había pedido que dejara de ser su mánager. “Eso me dolió mucho y quedé con mucho sufrimiento interno por el desprecio”, relató.
La confesión ha escalado hasta el Palacio de La Moneda, en Santiago, donde el subsecretario del Interior del Gobierno de Gabriel Boric, Manuel Monsalve, confirmó que disponen de antecedentes de que María Natalia Améstica –quien también admitió en la grabación que tras el crimen huyó “aterrada” al país sudamericano–, tiene doble nacionalidad, venezolana y chilena; mientras su hermano es chileno.
Monsalve ha dicho este miércoles que respetan la actuación de la justicia en otras naciones y esperan que “eso sea lo que ocurra en todos los países” sin distinción de nacionalidad. “En Chile no toleramos la xenofobia”, ha explicado en una conferencia de prensa. El subsecretario del Interior respondió así a los dichos del fiscal William, quien antes había declarado a los medios de comunicación que “a pesar de tratarse de dos ciudadanos chilenos”, en Venezuela se le estarían respetando sus derechos: “¡Qué diferente hubiese sido si dos venezolanos hubiesen matado a Víctor Jara! No me lo quiero imaginar. Si por estar unos venezolanos en Chile, a veces caminando por una plaza, les entran a palo, los persiguen. Una xenofobia antivenezolana brutal”.
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