La Cruz Roja Estadounidense, (The American Red Cross) un actor clave en el sistema de donación de sangre del país, ha declarado una escasez de sangre de emergencia.
Por El Diario NY
La Cruz Roja, responsable de alrededor del 40% de las donaciones de sangre del país, informó en un comunicado de prensa sobre una escasez de emergencia que compromete la capacidad de algunos hospitales para recibir suficiente sangre para sus pacientes.
Esta escasez podría ser particularmente problemática para los pacientes con tipos de sangre raros o aquellos que requieren grandes cantidades de sangre, según el comunicado.
El déficit ha llegado a un punto en el que las cirugías, incluidas operaciones cardíacas vitales, podrían posponerse debido a la falta de suministro de sangre adecuado.
Esta situación plantea un desafío importante para los hospitales, lo que podría conducir a una reducción de la disponibilidad de sangre para los pacientes e incluso a la cancelación de cirugías críticas.
Impacto a largo plazo de la pandemia en las donaciones de sangre
La pandemia de Covid-19 ha alterado significativamente los métodos tradicionales de donación de sangre. Con más estadounidenses trabajando desde casa, las campañas de donación de sangre realizadas por empleadores, que alguna vez fueron una fuente sólida de donaciones, han experimentado una disminución.
Además, se están realizando menos campañas de donación de sangre en escuelas secundarias y universidades, que antes eran lugares clave para recolectar donaciones.
Este cambio en el comportamiento social ha provocado una marcada disminución de las donaciones de sangre, lo que ha exacerbado la crisis actual.
Desafíos futuros para los centros de recolección de sangre
La Cruz Roja y los centros de recolección de sangre independientes, como America’s Blood Centers, enfrentan una escasez crítica de donaciones. La situación es tan grave que algunos centros tienen un suministro de sangre para menos de dos días, muy por debajo del suministro deseado de tres días para atención de emergencia y operaciones programadas.
El cambio hacia el trabajo remoto inducido por la pandemia y el lento repunte de las campañas de donación de sangre en las escuelas agravan aún más estos desafíos, creando una escasez de suministro a largo plazo.
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