Las famosas Meninas de la Corte Real española pintadas en el siglo XVII por Diego Velázquez salieron del museo del Prado en Madrid para exhibirse como esculturas en las calles de Caracas gracias a una reinterpretación del artista venezolano Antonio Azzato.
Tras una gran exposición en la capital española bajo el título “Meninas Madrid Gallery”, las Meninas llegaron a Venezuela en una renovada experiencia: “Meninas Caracas Gallery”.
“Yo diseño una escultura en blanco con la silueta de Las Meninas para llevarla a las calles con una narrativa diferente a la que está en el museo, para que la gente se conecte de una manera diferente al arte y generar interés en esa gente para que vaya a los museos y sepa de dónde viene esta obra”, relata a la AFP Azzato.
Son diecinueve Meninas inspiradas en la cultura venezolana: una muestra al Salto Ángel, la cascada más alta del mundo ubicada en el sur del país; otra está vestida con una torre petrolera para representar la riqueza de la nación; otra con un barril de ron… y todas están en las calles del municipio Chacao, un sector de clase media alta de la capital venezolana.
Del total, cinco fueron diseñadas por celebridades venezolanas como el cantante de salsa Óscar de León, los beisbolistas Gleyber Torres y Ronald Acuña, la futbolista Deyna Castellanos y el diseñador de moda Ángel Sánchez.
Azzato encontró inspiración tras visitar el Museo del Prado: “Yo estaba en el Museo del Prado viendo el cuadro y había una persona sentada llorando mientras estaba viéndolo al lado mío y dije: ‘aquí pasa algo y hay que investigarlo’”.
“Y Velázquez fue un genio pintando sobre todo lo que no vemos el alma y el aire y entonces en el aire nos nuevas incógnitas por descifrar. Y es que pintaba el detrás de ese lienzo, por eso yo llegué a la conclusión de que Velázquez necesita seguir transmitiendo un mensaje”, continúa.
“Volver a los orígenes”
Más conocido en España que en Venezuela, Azzato, “hijo de inmigrantes españoles e italianos”, ve este viaje de las Meninas como un símbolo.
“Es como volver a los orígenes, a casa”, dice Azzato que piensa que la obra de Velázquez se hizo “gracias a las riquezas americanas” porque cuando fue pintada España vivía el final del siglo de oro español”.
“Es una manera de Velázquez agradecer el origen que hizo posible realizar su obra”, añade.
Las obras estarán exhibidas durante dos meses, y cinco de ellas serán vendidas en una subasta a beneficio de cinco oenegés de este país que atraviesa una dura crisis económica.
La exhibición da una cara distinta a la ciudad. Los transeúntes de la estación de metro Chacaíto observan la escultura con curiosidad: la menina vestida con colores de la bandera venezolana parece estar haciendo fila para subirse a un autobús.
La obra “trae acá a Caracas, a Venezuela, esta parte cultural que nos hacía mucha falta, muestra el colorido y nos enorgullece también”, dice la gerente María Auxiliadora Valera, de 47 años. Es un “disfrute”.
La estudiante Mireya Rojas, de 20 años, en tanto, siente admiración. “Son bellísimas todas”.
“Debería darse más cultura, sobre todo este tipo de cosas que puedan ser gratis. Que la gente pueda admirar este tipo de cosas tan bellas”, añade Rojas.
“El arte es para todos”, concluye Azzato. AFP