Miles de personas ocupan las calles de Copenhague desde primeras horas de la mañana para asistir a la histórica abdicación de la reina Margarita II y la proclamación como nuevo rey de su hijo mayor, el príncipe heredero Federico.
Tanto los trenes como los autobuses a la capital han registrado niveles de ocupación inusuales desde todas partes del país, con muchas líneas con billetes agotados, a pesar de que, por ejemplo, la empresa estatal de ferrocarril (DSB, ha puesto vagones adicionales para satisfacer la demanda.
También las carreteras ofrecen un tránsito poco habitual desde primeras horas de la mañana, por gente que ha cruzado el país en coche para asistir al evento.
Uno de ellos es Mads, natural de un pueblo del sur de Dinamarca, que salió a las 05.00 de la mañana con sus dos hijas, Frida y Vorska, para después de tres horas y media llegar a la capital, aparcar fuera del centro, tomar un metro y estar en la plaza de Christiansborg, donde se hará la proclamación, seis horas antes.
“Teníamos muchas ganas y hemos traído sillas, porque queríamos llegar pronto y estar seguros de tener un buen sitio”, dijo a EFE.
La idea de viajar a Copenhague responde a una promesa hecha hace “muchos años” de acudir un día a la proclamación del futuro rey.
“La Casa Real es una institución muy importante en Dinamarca. Tiene una larga historia y, de alguna manera, nos une a todos los daneses. Lo ha hecho muy bien, es un punto de unión”.
Mucho más largo aún ha sido el viaje de Judy y su nieta Ebony, que llegaron hace unos días de Brisbane (Australia).
“Bueno, decidimos el miércoles de la pasada semana que queríamos viajar aquí. Compramos los billetes, conseguimos alojamiento y aquí estamos”, afirma Judy, quien justifica el viaje, pese a no tener ningún lazo con este país nórdico, porque “amamos Copenhague y a la familia real”.
Su nieta habla de “una gran oportunidad” y de “formar parte de la historia”, de una “ocasión muy especial”, aunque el hecho de que la futura reina Mary sea de origen australiana ha sido una baza a favor.
“Pienso que ella es encantadora. Estamos muy orgullosos de ella. Es un día emocionante”, afirma Ebony, que como su abuela sostiene una bandera australiana.
El programa de actos comenzará a las 13.35 hora local (12.35 GMT), con la salida del palacio de Amalienborg de los príncipes herederos y la posterior de la reina, que recorrerá en carroza el kilómetro y medio que hay hasta Christiansborg, donde se espera que sea aclamada por miles de personas.
Margarita II, la monarca viva con más tiempo en el trono, clausurará este domingo 52 años de reinado tras anunciar por sorpresa en su discurso de Fin de Año su abdicación, aduciendo problemas de salud y la necesidad de dar paso a la nueva generación.
En las monarquías nórdicas no es costumbre abdicar: el último precedente en Dinamarca se remonta a 1146, cuando Erico III abandonó el trono para retirarse a un monasterio.
EFE