Este lunes 15 de enero, Día del Educador, los maestros del estado Anzoátegui conmemoraron la fecha exigiendo mejores salarios al Gobierno nacional y la firma de la tercera contratación única y unitaria del magisterio.
Javier A. Guaipo / Corresponsalía lapatilla.com
En la Casa del Maestro, ubicada en Barcelona, los diferentes sindicatos que integran la Coalición Magisterial realizaron una gran asamblea en la que, entre otras cosas, acordaron presionar a los dirigentes de las federaciones nacionales para que estos a su vez eleven los reclamos al Ejecutivo.
“Hoy conmemoramos el Día del Educador, más no tenemos nada que celebrar. Hoy los docentes no solo morimos de hambre, sino también por falta de asistencia médica. En los últimos días han fallecido varios educadores por esa razón y eso es inaudito en un país donde se empiezan a reestablecer relaciones económicas”, expresó Maira Marín, presidenta del Sindicato Venezolano de Maestros (Sinvema) en la entidad.
A juicio de la vocera, al gobierno chavista se le acabaron las excusas para decir que no hay recursos para firmar una tercera contratación y reestablecer los derechos adquiridos y que les han ido arrebatando en los últimos años.
Marín explicó que los docentes tienen un salario que va entre 426 y 760 bolívares (según el rango que ocupe en el tabulador), lo cual asegura que no alcanza para nada, debido a que la canasta básica ronda los 500 dólares.
“Un educador hoy no puede sobrevivir con ese salario, y la alternativa que han conseguido es dejar sus puestos de trabajo o cumplir medio turno para salir a ejercer otras labores. Hay quienes hacen de taxista, de buhonero, de empleada doméstica, etc. Y aunque no nos deshonra, nosotros no estudiamos para eso, sino para formar a la generación de relevo”, manifestó.
Caminata
En apoyo a los maestros en su día, representantes de distintos sindicatos adscritos a la Federación de Trabajadores del estado Anzoátegui (Fetranzoátegui) realizaron una caminata desde la Plaza Bombón de Barcelona hasta las afueras de la sede de la gobernación y luego se movilizaron hasta la Plaza Bolívar.
Al igual que en la Casa del Maestro, la exigencia fue hacia el Gobierno nacional por mejores salarios y la restitución de los múltiples beneficios que les han quitado.