A juicio del presidente del sindicato Unión Regional de Empleados Públicos del estado Anzoátegui (Urepanz), José Hurtado, el ajuste de ingreso mínimo anunciado por el Gobierno venezolano es “pan para hoy y hambre para mañana”.
Por Corresponsalía lapatilla.com
Vale recordar que el Ejecutivo Nacional anunció el pasado lunes 15 de enero que el bono de guerra (el cual sólo reciben los trabajadores públicos) pasa de 30 a 60 dólares. Sumado a los 40 dólares de cesta ticket alcanzan los 100 dólares en bonificación, aunque el salario mínimo se mantiene en 130 bolívares.
“Los ajustes de los bonos son bien recibidos, pero difiero en lo que dijo el presidente de que forman parte del salario integral. Si eso fuera así, debería generar incidencia en el bono de fin de año, vacacional y en las prestaciones sociales, y eso no existe”, expresó el sindicalista.
Para Hurtado, “el Gobierno le decretó la guerra a muerte al salario en Venezuela”, pues no hay aumento desde marzo de 2022. Insistió en que el ajuste en las bonificaciones es “pan para hoy y hambre para mañana” por lo antes explicado.
El vocero considera que el Gobierno nacional se ha dado la tarea de crear una nueva clase social en el país: “La clase social miserable, que al día de hoy somos los trabajadores públicos de este país”.
Expresó, además, que desde Urepanz elevan la voz de protesta en contra de estas acciones e informó que en estos días estará reuniéndose la Coalición Sindical del estado Anzoátegui para evaluar qué acciones tomarán.
“Es inaudito que quien dice haber sido dirigente sindical (Nicolás Maduro), hoy sea quien esté asesinando a los trabajadores. Usted, presidente, se ha vuelto el genocida de la clase trabajadora del sector público”, finalizó.