Una infidelidad entre socialité y exestrella de los Dodgers acabó con la vida de dos niños en Los Ángeles

Una infidelidad entre socialité y exestrella de los Dodgers acabó con la vida de dos niños en Los Ángeles

Rebecca Grossman, cofundadora de la Fundación Grossman Burn, abandona el juzgado de Van Nuys durante un descanso de su audiencia preliminar (Imagen: Los Angeles Times vía Getty Images)

 

Una socialité casada está acusada de almorzar con su examante estrella de Los Ángeles Dodgers antes de subirse a su SUV Mercedes en estado de ebriedad y atropellar fatalmente a dos niños.

Por Mirror





Rebecca Grossman, de 60 años, ha sido acusada de asesinato en segundo grado por el accidente que mató a Jacob Iskander, de ocho años, y a su hermano Mark, de 11, el 29 de septiembre de 2020.

La selección del jurado para su juicio en el condado de Van Nuys, Los Ángeles, comenzó el martes. Grossman insiste en que ella no chocó a los niños y niega haber conducido a 81 mph. Según los informes, su presunto amante, Scott Erickson, conducía una camioneta separada después de almorzar en Julio’s en Westlake Village.

Marcos y Jacob estaban caminando con su familia cuando los mataron ( Imagen: VCCF)

 

Grossman, quien está casada con el cirujano de quemaduras Dr. Peter Grossman, y Erickson se dirigían en sus dos autos a un apartamento de Westlake Village cuando ocurrió la tragedia, según los fiscales. Erickson, que ahora tiene 55 años, fue acusado de un delito menor y su caso se resolvió en febrero de 2022 cuando un juez le ordenó hacer un anuncio de servicio público sobre la conducción segura para estudiantes de secundaria.

Erickson jugó con Los Ángeles Dodgers en 2005 y terminó su carrera con los New York Yankees en 2006. Ahora está divorciado. Los cargos de asesinato de Grossman son inusuales ya que no hubo ningún cargo de conducir bajo los efectos del alcohol. Su prueba de alcoholemia mostró un contenido de alcohol en sangre del 0,076 por ciento, ligeramente por debajo del límite legal de California del 0,08 por ciento. Una muestra de sangre tomada tres horas después del accidente registró una marca del 0,08 por ciento.

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