Un hombre de 43 años murió apuñalado este sábado en Argentina, víctima de un enfrentamiento entre hinchas en el marco de un partido de la Primera B Nacional -Segunda División del fútbol local-, que disputaban el Chacarita Juniors y el Maipú.
Según el informe de las fuerzas de seguridad, todo comenzó con un enfrentamiento entre simpatizantes del club local en el área de la Tribuna Popular, conocida como ‘La Famosa’, quienes posteriormente se trasladaron al exterior del estadio, donde iniciaron una pelea a puñetazos y de la que uno de ellos salió “con una herida de arma blanca en el pecho”.
Pese a que el hombre, identificado como Jorge Daniel Durán, fue trasladado en ambulancia a un hospital, no se le pudo estabilizar y los sanitarios sólo pudieron certificar su fallecimiento.
Pese a que el partido estuvo interrumpido durante unos 20 minutos, este se reanudó y continuó hasta el final, con un triunfo para los locales por 2-0, ambos conseguidos en el primer tiempo, obra de Matías Pisano (m.18, de penalti) y de Ramiro Costa (m.45+2).
El club anfitrión expresó en su cuenta oficial de Instagram “su más enérgico repudio” al suceso de este sábado y agregó que para “esclarecer lo acontecido” puso a disposición de las autoridades las cámaras de seguridad del estadio.
“Trabajaremos junto a las autoridades y en el caso que haya socios que hayan participado de los hechos, se procederá a expulsarlos de por vida de la institución ya que nada tienen que ver con los valores que pregonamos”, concluyó el mensaje.
La violencia es uno de los males endémicos del fútbol argentino. El último choque entre hinchadas, aunque sin resultado fatal, se registró el pasado fin de semana, cuando aficionados de la ‘barra brava’ (grupo violento) del River Plate se enfrentaron con otros hinchas también ‘millonarios’ en los prolegómenos del partido entre el equipo de Martín Demichelis y Argentinos Juniors.
En ese duelo, hubo 30 detenidos, posteriormente puestos en libertad, aunque han recibido la prohibición de pisar una cancha de fútbol durante los próximos cuatro años.
EFE