La dueña de la franquicia Miss Universo, la multimillonaria tailandesa Anne Jakkaphong Jakrajutatip, informó este jueves que contrató en la sede de México a la exdirectora de la organización en Nicaragua, Karen Celebertti, quien fue desterrada por el Gobierno que preside Daniel Ortega y acusada por los delitos de conspiración y traición a la patria.
“¡Bienvenido al equipo de MUO! @karencelebertti (y su hija) @lucianaarguelloc. Estamos muy felices de teneros a ambos cuidando el departamento de gestión del talento mundial en la sede de México”, anunció la ejecutiva de ese certamen de belleza en sus redes sociales, en la que compartió fotografías con Celebertti y su hija.
“Todo el mundo está muy orgulloso de lo que has logrado por la dignidad de la mujer en los últimos 23 años. ¡Aquí está tu nuevo hogar donde estoy segura de que vas a sacar mucho coraje, bondad y amor a nuestras reinas del universo!”, continuó.
Jakkaphong Jakrajutatip dio las gracias a Celebertti, a quien llamó “mamá Karen”.
Celebertti, quien se encuentra en México después de que las autoridades le impidieran retornar a su país, se retiró de la franquicia de Miss Universo en Nicaragua, que dirigió por 23 años, después de que la Policía detuviera a su esposo y a uno de sus hijos en Managua.
La Policía, que dirige un consuegro del presidente Ortega y de la vicepresidenta, Rosario Murillo, acusó a Celebertti, a su esposo, Martín Argüello, y a un hijo de ambos, de presuntamente haber cometido delitos de conspiración para alterar la paz e incitar al odio, violencia, terrorismo, crimen organizado y provocación, aunque no presentaron una acusación judicial.
También fueron señalados por supuesta apología e inducción a la comisión de delitos a través de las tecnologías de la información y la comunicación, además de propagación de noticias falsas, así como traición a la patria, y lavado de activos desde 2018.
Además, acusó a la organización de Miss Nicaragua bajo la dirección de Celebertti, de utilizar la franquicia, plataformas “y espacios supuestamente dedicados a promover inocentes concursos de belleza, en una conspiración que ha trabajado orquestadamente para convertir los certámenes en trampas y emboscadas políticas, financiadas por agentes extranjeros”.
La ahora exdirectora de Miss Nicaragua fue acusada dos semanas después de que la nicaragüense Sheynnis Palacios fuera elegida como Miss Universo 2023 y que la población lo celebrara de forma espontánea y masiva en las calles del país, pese a una prohibición oficial de manifestarse en la vía pública.
El esposo y el hijo de Celebertti regresaron a Nicaragua un día después del certamen de belleza, el 19 de noviembre y fueron detenidos días después por la Policía, que los calificó además de “traidores” y “apátridas”.
En la primera semana de enero, las autoridades nicaragüenses excarcelaron y expulsaron al esposo e hijo de la exdirectora de Miss Universo en Nicaragua.
Sheynnis Palacios, de 23 años, graduada en comunicación social y quien vivirá en Nueva York (EE.UU.) por un año para atender sus compromisos con la franquicia internacional, aún no tiene fecha de retorno a Nicaragua. EFE